DEL PARADIGMA
TEORÍA CRÍTICA
El
término teoría crítica
es sin duda inadecuado para incluir a todas
las alternativas que pueden caer dentro
de este paradigma. Un término más
apropiado podría ser “indagación
orientada críticamente” que
incluye al neo-marxismo, materialismo, feminismo,
freirismo, indagación participatoria
y otros movimientos similares, así
como la teoría crítica por
sí misma. Las creencias básicas
de este paradigma pueden ser resumidas de
la siguiente manera:
Ante
la pregunta ontológica, la teoría
crítica sostiene que hay una realidad
objetiva, expresada en la frase “falsa
conciencia” lo que implica que hay
una “conciencia verdadera” en
algún lugar o “fuera de”
o más probablemente, poseída
en cierta forma por el investigador o en
alguna elite mejor informada. A esta situación
se le denomina realismo crítico,
muy similar al que sostiene el postpositivismo.
Con
respecto a la pregunta epistemológica,
la teoría crítica mantiene
una epistemología subjetivista, esto
quiere decir que los actos de la indagación
están íntimamente ligados
a los valores del investigador. Los valores
mediatizan la indagación, por lo
que podríamos decir que es de corte
subjetivista.
A
la pregunta metodológica, la teoría
critica responde que la meta de los investigadores
es transformar el mundo “real”
a través de elevar la conciencia
de los participantes de tal forma que ellos
sean energizados y se les facilite el camino
hacia la transformación. Dado lo
anterior, se requiere de una metodología
dialógica transformativa, que elimine
la falsa conciencia y anime a la intervención
y transformación.