EVIDENCIA (GROUND, DATA):
Una
aserción sostiene el punto de vista que un
investigador trata de defender sobre un tema específico.
La razón por la cual ella se mantiene está
en la evidencia, constituida por los datos o hechos
de un caso. Si se afirma: “Luis Mariano,
el cantor de Canchunchú, es oriental”
¿por qué afirmo o sostengo que Luis
Mariano es oriental? La respuesta está en la
evidencia que permite concluir que Luis Mariano es
oriental porque nació en Carúpano,
un pueblo precioso del oriente de Venezuela.
La
evidencia aporta la razón (información)
en la que la aserción se basa. Por ejemplo,
si a un consultorio llega un paciente con fiebre y
tos, el médico puede hacer una aserción
(diagnóstico): “probablemente tiene gripe”.
Pero si además llegan otros pacientes con los
mismos síntomas, puede aseverar (concluir)
que se trata de una virosis. Los síntomas del
paciente serán los datos (evidencia) de los
cuales parte para hacer su aserción.
La
evidencia está formada por hechos o condiciones
que son observables. Puede ser una creencia o una
premisa (conclusión) aceptada como verdadera
dentro de una comunidad, mas no una opinión.
Es el argumento que se ofrece para soportar la aserción
(premisa o tesis). Es la prueba. Existen diversos
tipos de evidencias: estadísticas, citas, reportes,
evidencias físicas. Es la mayor fuente de credibilidad
y deriva también del juicio de expertos, autoridades,
celebridades, amigos o de la propia persona.
La
evidencia es significativa porque establece la base
de toda la argumentación. Cualquier fenómeno,
anécdota, puede brindar la pauta. En un salón
de clase el hecho de que los alumnos muestren pocas
habilidades para responder preguntas en forma oral
puede inducir a que un docente exprese las siguientes
aserciones que podrían servir de punto de partida
para un trabajo de investigación:
La
evidencia también puede provenir de una persona,
experta en una materia o diestra en un oficio, sin
embargo, en el caso de un docente o médico,
el salón de clase y el consultorio son ambientes
que generan datos (evidencias) valiosos para la investigación.
A la hora de buscar más evidencias para ahondar
sobre un fenómeno, se exhorta a trabajar con
fuentes primarias y evitar el “citado por”,
que revela o descuido o incapacidad para acceder a
fuentes confiables. Los números y las estadísticas
ofrecen datos que pueden convertirse en argumentos
férreos. Sin una evidencia, cualquier aserción
(tesis) se invalida o refuta con facilidad. De esta
manera, si un maestro observa que en el sector en
donde trabaja (a) hay mucha pobreza y (b) que muchos
niños abandonan el colegio, puede establecer
la siguiente aserción: