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10 de mayo de 2007 Vol.8, No.5 ISSN: 1607 - 6079 Publicación mensual

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Viejas y nuevas prácticas


En la actualidad, el horizonte de la producción de revistas culturales multimedia ha dado un giro de 180 grados, sin embargo se puede observar que aún persiste una tendencia muy marcada de repetir formas de producción propias de una publicación impresa. Ésto trae como consecuencia la subutilización de las herramientas que nos ofrece el soporte digital como el hipertexto, la multimedia y sobre todo la posibilidad de una actualización constante de los contenidos que están en línea.


La periodicidad de una publicación impresa queda impuesta por las características del soporte. Desde el punto de vista técnico sería bastante complicado imprimir una revista conforme se van generando las noticias o artículos. Si se hiciera así, la revista dejaría de serlo para convertirse una serie de cuadernillos o folletos. Por esto, para poder armar una revista en su conjunto se hace necesaria una fecha para cerrar la edición. Este tiempo que se tiene que esperar para que una publicación salga a circular en ocasiones suele verse como una desventaja de los medios impresos frente a la inmediatez de los electrónicos.1


Otra cosa que consume tiempo es la minuciosa revisión que se debe hacer, debido a que una vez impresa la revista cualquier error que se detecte ya no puede ser corregido. Si es que los editores no desean que dicho error aparezca, tendrían que volver a imprimir de nuevo y perder la inversión en material que ya se hizo.


En lo que se refiere a una revista elaborada sobre un soporte digital, estas desventajas no existen debido a que un archivo informático puede ser modificado en cualquier momento. De esta manera los documentos que conforman un periódico o revista electrónica pueden ser manipulados, aunque ya hayan sido publicados.


Con una revista electrónica es posible publicar un ejemplar en la red y dejarlo abierto no sólo a la consulta, sino a la continua modificación y actualización de la información que ésta contiene. Para publicar un artículo nuevo no es necesario esperar hasta que todo en su conjunto esté terminado, se pueden ir publicando las notas hasta que la edición quede completa.


Hablar de un número “terminado” de una revista electrónica actualmente parece contradictorio; pareciera que las publicaciones electrónicas están en una “construcción eterna” debido a que el soporte digital permite que no exista una hora para cerrar la edición., lo cual brinda la posibilidad de actualizar los sitios web con noticias que surgen en el momento. 2

Esto ha sido comprendido por publicaciones que nacieron originalmente como medios impresos y que ahora están presentes en Internet. En México, revistas como Proceso y periódicos como La Jornada y El Universal tienen páginas web que no permanecen estáticas. Las 24 horas del día actualizan sus sitios con las mismas noticias que generan sus reporteros. De esta manera, en la red podemos ver como se va conformando lo que será la próxima edición impresa.


Si las publicaciones que nacieron como un medio impreso están aplicando otras formas de difusión para Internet, resulta absurdo que una revista electrónica siga con las prácticas de edición tradicional y con ello desperdiciando las posibilidades que brinda el soporte digital.

 


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