El aprendizaje en el museo

En un principio se registraba el aprendizaje en los museos de manera anecdótica y haciendo uso de técnicas de evaluación importadas del ambiente educativo formal. Pero una vez que se han comprendido las particularidades del aprendizaje que ocurre en el museo, y que se han desarrollado metodologías específicas para detectarlo, es que se ha concluido que se trata de un proceso único. Éste ha sido denominado aprendizaje informal, y se caracteriza por tener una naturaleza personal, idiosincrásica y contextual (Falk, JH.y L.D. Dierking, 2002).

El aspecto contextual del aprendizaje informal es de suma importancia, especialmente en el aspecto social, dado que en general los visitantes acuden al museo acompañados por otras personas, por lo que consciente o inconscientemente se relacionan entre sí. Mientras discuten, cuestionan y observan a otros, se retroalimentan de los conceptos e ideas exhibidas, por lo que la experiencia vivida en el museo se ve moldeada socialmente. Lo anterior es particularmente notorio en las visitas familiares (Falk, J.H., et al 2007).

Al mismo tiempo que se registra y estudia esta forma de aprendizaje recientemente reconocida, los museos se ven en la necesidad de ofrecer aspectos interesantes y accesibles para una gran variedad de visitantes, no sólo de diferentes edades, sino también de distintos intereses y formaciones previas.

Figura 4. Museo explora, visita de adultos mayores