PAPEL BARITADO Estos papeles permiten producir imágenes tanto suaves como duras gracias a sensibilizadores cromáticos incorporados azul y verde. Utilizando el set filtros habituales. El papel fotográfico baritado o de gelatina está constituido por una emulsión de gelatina fotosensible, fundamentalmente del mismo tipo que el que presentan las placas de gelatino bromuro, colocada sobre una fina lámina de sulfato de barita a su vez colocada sobre una hoja de papel. La función de la plancha de sulfato de barita, sustancia inerte y muy blanca, es la de servir de "fondo" blanco de la imagen. En el papel albúmina este fondo blanco lo constituye el propio papel en que se deposita la albúmina, lo cual obligaba a que éste fuera de muy buena calidad, lo que eleva considerablemente el precio de este tipo de papel fotográfico. Por el contrario en los papeles baritados se consigue la "blancura" (las luces) de la imagen con el sulfato de barita, sustancia de un precio muy bajo y que puede ser aplicado en fábrica, al igual que la gelatina, en rollo, detalle fundamental para la fabricación a bajo costo de los nuevos materiales fotográficos de este tipo. En virtud del uso del sulfato de barita los nuevos papeles fotográficos pueden fabricarse con papel de baja calidad, lo que incide muy sustancialmente en la reducción de costes de producción. Fotográficamente, tal vez la gran ventaja de los papeles baritados sea su gran estabilidad, bastante mayor que la de los papeles albúmina, factor que interviene decisivamente en el éxito de los distintos productos fotográficos que se van incorporando al mercado fotográfico del siglo XIX. La gran estabilidad de la imagen producida en un papel gelatina o baritado se deriva del hecho que ésta constituida por grandes nódulos fibrosos de plata. |