1 de Julio de 2000 Vol. 1 No.1


LOS DINOSAURIOS EN MÉXICO
René Hernández Rivera

(continuación...)

Localidades del Período Jurásico en México

Hasta principios del año 2000 no se han reportado descubrimientos de restos de dinosaurios en rocas del período Triásico en México. Por lo que respecta al Período Jurásico se han encontrado algunos dientes aislados de dinosaurios ornitísquios relacionados tentativamente con los heterodontosaúridos y terópodos probablemente del grupo de los coelosaúridos y otros terópodos de tamaño grande en el Cañón Huizachal en el estado de Tamaulipas.

Esta localidad, descubierta en 1982, por el Dr. James M. Clark, es de gran importancia para México porque de ella se han registrado los vertebrados terrestres más antiguos en la República Mexicana, con una edad de 180 millones de años aproximadamente, lo que la ubica en lo más tardío del período Jurásico temprano.

Los fósiles que vivían en ese sitio incluyen a los Tritilodóntidos, representados por el género Bocatherium mexicanum, considerados como mamíferos reptiloides. También se han identificado por lo menos cinco taxa diferentes de mamíferos.

Otros vertebrados presentes son los cocodrilomorfos y al menos tres distintos esfenodontes relacionados con las tuátaras. Dos de ellos han sido bautizados con los nombres Cynosphenodon huizachalensis y Zapatodon ejidoensis.

Destaca por su importancia un enigmático animal al que se le llamó Tamaulipasaurus morenoi parecido a los anfisbaénidos actuales, reptiles excavadores con los ojos bastante reducidos.

El otro ejemplar de enorme importancia es un reptil volador que representa una nueva especie a la que se le dio el nombre de weintraubi del Género Dimorphodon, cuyo estado de preservación es asombroso porque se conservó en tres dimensiones, o "en bulto", un caso muy raro, ya que casi todos los pterosaurios que se han encontrado están aplastados, es decir se presentan en dos dimensiones.

Dimorphodon
Como caminaban

Las características de su anatomía, en especial la forma del pie, son prueba para demostrar que los reptiles voladores o pterosaurios primitivos caminaban en cuatro patas y no en dos como algunos autores han sugerido.

La reconstrucción paleoecológica del área ha sido interpretada como un lugar en donde existía actividad volcánica con erupciones, lluvia de cenizas y aludes de lodo, algo semejante a lo que sucedió, hace algunos años en el volcán Chichonal del estado de Chiapas. Los animales quedaron atrapados por los derrames y/o por la lluvia de cenizas que los sepultaron y al mismo tiempo permitieron su conservación, en un proceso de fosilización poco usual y casi único de preservación de vertebrados.

Esto también explicaría porqué no hay ejemplares de mediano a gran tamaño y sólo se encuentran fósiles de tamaño pequeño.

En el estado de Puebla, en las "capas rojas" cercanas al pueblo de San Felipe Ameyaltepec, se han recolectado fragmentos de huesos grandes identificados como saurópodos; sin embargo, la edad de las rocas aún está en discusión. Como también están en duda los restos bastante fragmentados de dinosaurios descubiertos en rocas de este período en el estado de Chiapas.


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