Vol. 24, núm. 3 mayo-junio 2023

Alimentación y clases virtuales: experiencias de estudiantes universitarios

Ma. de los Ángeles Vacio Muro, Martha Leticia Salazar Garza, Gian Carlo Floriano Zermeño y Alberto Díaz Esparza Cita

Resumen

El confinamiento debido a la pandemia de covid-19 ha tenido un impacto en la vida de los estudiantes universitarios, especialmente en su alimentación. Estudiar desde casa ha afectado la motivación, la interacción social y las conductas relacionadas con la salud. Si bien ya se ha documentado que una vez que los jóvenes ingresan a la universidad, establecen malos hábitos de alimentación a causa del cambio en su rutina diaria, el confinamiento ha agravado la dificultad de mantener una alimentación saludable en esta etapa de vida. El objetivo de este estudio fue conocer las experiencias de los universitarios al estudiar desde casa y su impacto en su alimentación. Se entrevistaron grupos de jóvenes universitarios que pasaron de estudiar en modalidad presencial a estudiar en modalidad virtual. Los participantes hablaron sobre las ventajas y desventajas de estudiar desde casa para mantener una alimentación saludable, así como los cambios que implementaron para mejorar su salud. Los jóvenes reconocieron su responsabilidad de mantener hábitos alimentarios saludables y actividad física para disminuir el estrés.
Palabras clave: confinamiento, covid-19, estudiantes universitarios, alimentación saludable, hábitos alimenticios.

Feeding and virtual classes: student experiences

Abstract

The lockdown due to the covid-19 pandemic has had an impact on the lives of university students, especially on their diet. Studying from home has affected their motivation, social interaction, and health-related behaviors. While it has already been documented that once young people enter university, they establish poor eating habits due to changes in their daily routine, the lockdown has exacerbated the difficulty of maintaining a healthy diet during this stage of life. The aim of this study was to understand the experiences of university students when studying from home and its impact on their diet. Groups of young university students who transitioned from studying in person to studying virtually were interviewed. Participants discussed the advantages and disadvantages of studying from home to maintain a healthy diet, as well as the changes they implemented to improve their health. The young students recognized their responsibility to maintain healthy eating habits and physical activity to reduce stress.
Keywords: lockdown, covid-19, University students, Healthy eating, Eating habits.

Introducción

La Organización Mundial de la Salud (oms, 2022) ha reconocido que la pandemia de covid-19 ha llevado a muchas personas a quedarse en casa, lo que ha dado lugar a riesgos tanto para la salud física como para la salud mental. En el caso de los estudiantes universitarios, se ha informado de un gran impacto del confinamiento en su estilo de vida. En particular, el cambio en la modalidad de aprendizaje ha tenido implicaciones no solo académicas, sino también en la motivación, la interacción social y los comportamientos saludables (González-Ramírez et al., 2020), como la alimentación (ver Video 1).



Video 1. Algunos consejos proporcionados por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO, 2020) sobre cómo alimentarse de manera saludable durante los días de confinamiento.


Cambios en el estilo de vida a causa de la pandemia

El término “estilo de vida” se refiere a las reglas y hábitos que determinan nuestro comportamiento cotidiano, así como a los patrones de conducta individuales que se mantienen con cierta consistencia en el tiempo y bajo condiciones más o menos constantes. Estos comportamientos pueden ser considerados riesgosos o seguros, dependiendo de su naturaleza (Sánchez-Ojeda y Luna-Bertos, 2015). Por lo tanto, los comportamientos saludables son todas aquellas acciones que influyen positivamente en la salud y el bienestar personal.

El impacto del confinamiento en los estilos de vida de los estudiantes universitarios, en particular en los comportamientos saludables, ha sido documentado en diferentes países. Algunos hallazgos relevantes se resumen en la Tabla 1.

País Cambios en estilo de vida reportados
España
(Ruiz-Zaldibar et al., 2022)
  • Las mujeres disminuyeron su estilo de vida saludable más que los hombres.
  • Mejoramiento del estilo de vida.*
Francia
(Gonçalves et al., 2021)
  • Incremento en el consumo de alcohol.
  • Aumento en niveles de sedentarismo y su persistencia.
Chile
(Vallejos, 2020)
  • Aumentaron los hábitos alimentarios saludables.*
Ecuador
(Jaramillo, 2020)
  • Predominan malos hábitos alimentarios y sedentarismo.
México
(Salgado-Espinosa y Cepeda-Gaytan (2021)
  • Aumento en la ingesta de alimentos.
  • Preocupación por cuidar la alimentación.*

Tabla 1. Cambios en los estilos de vida y comportamientos saludables en estudiantes universitarios de diferentes países.
Fuente: elaboración propia.

* Son comportamientos saludables.

Durante el confinamiento, los estudiantes universitarios adoptaron tanto comportamientos saludables como no saludables, especialmente en lo que respecta a su alimentación. Es posible que esta ambigüedad se deba a que, como resultado de la crisis causada por la pandemia, los jóvenes reflexionaron sobre la importancia de adoptar buenos hábitos para cuidar su salud, incluyendo una mejor alimentación, aprovechando que no tenían que salir de casa.

Cambios en la alimentación debido a la pandemia: su importancia en la salud

Una alimentación saludable es aquella que proporciona todos los nutrientes esenciales y la energía necesaria para mantener una buena salud. Esto se logra mediante la combinación equilibrada de varios alimentos en calidad y cantidad adecuadas (ver Imagen 1). Se recomienda priorizar el consumo de vegetales y frutas debido a su contenido en carbohidratos, fibra, vitaminas y minerales (Franco et al., 2012; Izquierdo et al., 2004). Sin embargo, la dieta de los estudiantes universitarios se caracteriza por un bajo consumo de frutas, verduras y pescados, y un mayor consumo de comida rápida, snacks o aperitivos, refrescos y alcohol (Bernardo et al., 2017; Illescas et al., 2009).

Alimentación equilibrada y alta en carbohidratos y grasas

Imagen 1. Alimentación equilibrada (izquierda) y alimentación alta en carbohidratos y grasas (derecha).
Fuente: elaboración propia.

La juventud es una etapa de la vida propicia para establecer estilos de vida saludables, pero también para arraigar malos hábitos que, a largo plazo, pueden derivar en enfermedades crónicas (Nelson et al., 2008). Si a esto se suman las condiciones impuestas por el confinamiento y los cambios en la dinámica diaria, la posibilidad de desarrollar malos hábitos aumenta.

Aunque son pocos los estudios que reportan el impacto del confinamiento en la alimentación de los estudiantes universitarios, es relevante su análisis debido al aumento en el porcentaje de estudiantes con sobrepeso y obesidad (por ejemplo, Campos-Uscanga et al., 2017; Franco et al., 2012) a causa de una alimentación desequilibrada (Bernardo et al., 2017). Incluso hay evidencia de que algunos jóvenes que recién ingresan a la universidad ya presentan alteraciones metabólicas (Betanzos et al., 2011).

Metodología y participantes del estudio sobre los cambios en la alimentación

Para cumplir con el objetivo del estudio, se formaron seis grupos focales compuestos por estudiantes universitarios de cinco instituciones, tanto públicas como privadas, en una ciudad del centro del país. Cada grupo estuvo compuesto por un mínimo de ocho y un máximo de doce participantes, para un total de 45 estudiantes de licenciatura en Biotecnología, Psicopedagogía, Psicología, Enseñanza del Inglés y Francés, y Filosofía, que cursaban el cuarto, sexto, octavo o noveno semestre. Todos los participantes habían asistido a clases presenciales durante al menos un año antes del confinamiento. Las entrevistas se llevaron a cabo en línea a través de la plataforma Microsoft Teams y se obtuvo el consentimiento previo de los participantes para videograbar, transcribir y categorizar las entrevistas. La información se analizó utilizando la herramienta tecnológica ATLAS.ti 7.

La guía de entrevista constaba de una pregunta introductoria que exploraba el concepto de alimentación saludable entre los jóvenes, seguida de preguntas sobre las ventajas y desventajas de estudiar en casa en relación con mantener una alimentación saludable.

Resultados del estudio sobre los cambios en la alimentación

En todos los grupos entrevistados, se definió el concepto de alimentación saludable como el consumo de frutas y verduras, la ingesta de todos los nutrientes, evitar la comida rápida, comer alimentos de calidad y evitar la comida chatarra.

En cuanto a las ventajas y desventajas de estudiar en casa para seguir una alimentación saludable, las respuestas se dividieron en cuatro categorías: desventajas, beneficios, contexto familiar e implementación de cambios. También se identificaron las relaciones entre las respuestas dentro de cada categoría.

La categoría de desventajas (ver Figura 1) incluye aspectos relacionados con el impacto de la carga de trabajo y el estado de ánimo en los horarios de las comidas, lo que se caracteriza por “picar constantemente”, es decir, comer de forma frecuente o posponer las comidas.

Categoría “desventajas”

Figura 1. Categoría de “desventajas” y la relación entre las respuestas.
Fuente: elaboración propia.

La segunda categoría se refiere a los beneficios de estudiar desde casa, que se dividen en dos aspectos: 1) tener más tiempo para preparar y consumir alimentos, gracias a la posibilidad de organizar los horarios para alimentarse y reducir el gasto en la compra de comida; y 2) tener alimentos al alcance de la mano, ya que al no tener que salir de casa, se redujo el gasto en comida y se mejoró la alimentación al consumir comida casera y evitar la comida chatarra (ver Figura 2). Además, comer en casa condujo a un ahorro financiero para las familias mexicanas. Si quieres saber más al respecto, puedes consultar el artículo “Se acabaron las comidas fuera: 67% de los hogares en México gasta más a la semana que hace 6 meses” de Business Insider México.

Categoría “desventajas”

Figura 1. Categoría de “desventajas” y la relación entre las respuestas.
Fuente: elaboración propia.

La tercera categoría aborda las implicaciones del contexto familiar en la adopción de una alimentación saludable (ver Figura 3). Los estudiantes universitarios se vieron obligados a aprender a cocinar debido a que sus padres tenían que trabajar. Por lo tanto, delegaban a sus padres la compra de alimentos saludables y ellos asumían la responsabilidad de preparar las comidas.

Categoría “contexto familiar”

Figura 3. Categoría de “contexto familiar” y la relación entre las respuestas.
Fuente: elaboración propia.

Finalmente, la cuarta categoría se enfoca en la implementación de cambios para enfrentar las consecuencias de no llevar una alimentación saludable (Ver Figura 4). Los universitarios implementaron cambios en dos aspectos: 1) Mostraron disposición para cambiar sus hábitos alimentarios, organizando los horarios de comida y su rutina diaria; y 2) Mejoraron su forma de alimentarse al reconocer la importancia de consumir alimentos de calidad y bajo costo, así como de tener una buena alimentación para disminuir el estrés.

Categoría “implementación de cambios”

Figura 4. Categoría de “implementación de cambios” y la relación entre las respuestas.
Fuente: elaboración propia.

El impacto del confinamiento en la alimentación de estudiantes universitarios

Conversar con los estudiantes universitarios sobre el impacto del confinamiento en su alimentación permitió profundizar en los factores que influyeron, tanto de forma positiva como negativa, así como en los cambios que implementaron para mejorar su alimentación. A partir de estas conversaciones, se puede concluir que estudiar desde casa favorece que los estudiantes asuman la responsabilidad de alimentarse saludablemente y mejoren sus hábitos, ya que estar en casa facilita la organización de los horarios de comida y la preparación de alimentos. Sin embargo, también puede afianzar los malos hábitos ya existentes e incluso generar otros nuevos. Por lo tanto, es importante que los jóvenes universitarios estén conscientes de sus comportamientos relacionados con la salud, puesto que debido a las exigencias de sus estudios, pueden descuidar su alimentación, a pesar de su importancia para un aprendizaje efectivo.

En la siguiente cápsula realizada por el noticiario “Saber Noticias” (2017), se puede encontrar información sobre la alimentación ideal para estudiantes:



Video 2. La alimentación ideal para estudiantes, incluye alimentos ricos en nutrientes como frutas, verduras, cereales, carnes magras y pescados.


Los participantes de este estudio reconocieron que, durante los primeros meses del confinamiento, su alimentación era desordenada y consumían todo tipo de alimentos en cualquier momento del día. Fue hasta que notaron un grado considerable de estrés o un aumento en su peso corporal que decidieron implementar cambios en su alimentación y organizar sus horarios.

En conclusión, los hallazgos resaltan la importancia de desarrollar estrategias que permitan orientar a los jóvenes sobre cómo alimentarse saludablemente en condiciones de confinamiento, con el fin de evitar las consecuencias negativas para la salud causadas por los malos hábitos.

Referencias

  • Bernardo, G. L., Jomori, M. M., Fernandes, A. C., y ProençA, R. P. da C. (2017). Food intake of university students. Revista de Nutrição, 30(6), 847-865. https://doi.org/10.1590/1678-98652017000600016.
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  • Campos-Uscanga Y, Romo-González T, del Moral-Trinidad LE, Carmona-Hernández NI. (2017) Obesidad y autorregulación de la actividad física y la alimentación en estudiantes universitarios: un estudio longitudinal. Revista en Ciencias del Movimiento Humano y Salud, 14(1). https://doi.org/10.15359/mhs.14-1.4.
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  • Illescas, I., Acosta, M. del C., Rosas, M., Sobrino, L. E., y Guzmán, L. (2009). La cultura alimentaria de los estudiantes de la Facultad de Nutrición Campus Xalapa. Revista Médica Universidad Veracruzana, 9(1), 57-62.
  • Izquierdo, A., Armenteros, M., Lancés, L., y Martín, I. (2004). Alimentación saludable. Revista Cubana de Enfermería, 20(1), 1-1.
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  • oms (Organización mundial de la salud). (2022, 18 de marzo). Sanos en casa. https://bit.ly/3L6O784.
  • Ruiz-Zaldibar, C., García-Garcés, L., Vicario-Merino, Á., Mayoral-Gonzalo, N., Lluesma-Vidal, M., Ruiz-López, M., y Pérez-Manchón, D. (2022). The Impact of covid-19 on the Lifestyles of University Students: A Spanish Online Survey. Healthcare, 10(2), 309. https://doi.org/10.3390/healthcare10020309.
  • Saber Noticias (2017, 6 de febrero). ¿Cuál es la alimentación ideal para los estudiantes? . YouTube. https://youtu.be/kHHFGxlRuYw.
  • Salgado-Espinosa, M. L. y Cepeda-Gaytana, L A. (2021). Alimentación, estados afectivos y actividad física en estudiantes universitarios mexicanos durante la pandemia por covid-19. Revista Española de comunicación en salud, 12(2), 151-164. https://doi.org/10.20318/recs.2021.6231.
  • Sánchez-Ojeda, M. A., y de Luna-Bertos, E. (2015). Hábitos de vida saludable en la población universitaria. Nutricion Hospitalaria, 5, 1910–1919. https://doi.org/10.3305/nh.2015.31.5.8608.
  • Vallejos, G. C. (2020). Hábitos alimentarios de los estudiantes de educación superior chile durante confinamiento por covid-19 (Tesis para obtener el grado de licenciatura). Universidad del Desarrollo.


Recepción: 07/06/2022. Aprobación: 10/04/2023.

Vol. 24, núm. 4 julio-agosto 2023

Prebióticos orales: alternativa para el tratamiento y prevención de caries

Juan Gerardo Sánchez Medina, Saray Aranda Romo, Rita Elizabeth Martínez Martínez, Mauricio Comas García y Othoniel Hugo Aragón Martínez Cita

Resumen

La caries es la enfermedad bucal más frecuente a nivel mundial. Se origina por una producción excesiva de ácido, que se forma cuando las bacterias que colonizan la boca digieren los azúcares presentes en la dieta. Sin embargo, existen azúcares que las bacterias orales no pueden digerir, que son conocidos como prebióticos. Los prebióticos son compuestos que pueden ser utilizados selectivamente por los microorganismos del huésped, en especial los intestinales, y le confieren un beneficio para su salud. Se encuentran presentes de forma natural en alimentos como la leche, miel de abeja, hortalizas, verduras, frutas, cereales, legumbres y frutos secos; también se pueden obtener mediante síntesis química o enzimática. En los últimos años, han surgido nuevas estrategias terapéuticas y preventivas para la caries, enfocadas en utilizar prebióticos en productos de higiene oral, alimentos y suplementos; sin embargo, no se trata de una práctica común en la odontología. Es importante conocer más acerca del beneficio que los prebióticos ofrecen a la salud oral de los individuos, para favorecer su utilización de manera rutinaria como complemento a los tratamientos dentales.
Palabras clave: caries, prebióticos, salud oral, remineralización.

Oral prebiotics: an alternative for treatment and prevention of caries

Abstract

Caries is the most common oral disease worldwide; it is caused by excessive acid production, which is formed when bacteria that colonize the mouth digest the sugars present in diet. However, there are sugars that oral bacteria cannot digest that are known as prebiotics. Prebiotics are compounds that can be selectively used by host microorganisms, especially from the intestine, that confer a health benefit on them. They are found naturally in foods such as milk, honey, vegetables, greens, fruits, cereals, legumes, and nuts; they can also be obtained by chemical or enzymatic synthesis. New therapeutic and preventive approaches to caries have emerged, focused on prebiotics in oral hygiene products, foods, and supplements; however, its use is not a common practice in dentistry. It is important to know more about the benefit that prebiotics offer to the oral health of individuals, to promote their routine use as a complement to dental treatments performed.
Keywords: caries, prebiotics, oral health, remineralization.

Caries: resultado del desequilibrio oral

La caries es un problema de salud a nivel mundial. En nuestro país se reportó en el año 2020 una prevalencia del 93.3% en la población (sivepab, 2022). Se caracteriza por un desequilibrio de todos los microorganismos que habitan la cavidad oral; en específico, hay una elevación de bacterias promotoras de caries (que generan ácidos), lo que lleva a la desmineralización de la superficie del esmalte que es la capa más superficial del diente. La saliva es un fluido clave en el mantenimiento del equilibrio en la cavidad oral, ya que evita la desmineralización y debido a su capacidad de neutralizar la producción de ácidos por las bacterias y controlar el pH oral (nivel de acidez). Incluso, la saliva promueve la remineralización de caries pequeñas, con adición de minerales (calcio y fosfato) al esmalte (ver figura 1). No obstante, cuando esta capacidad se ve rebasada surge la enfermedad, como resultado de una superficie dental susceptible, la ingesta frecuente de azúcares, la mala higiene dental y la persistencia de bacterias promotoras de caries, como Streptococcus mutans (Zhang, 2022).

Caries como proceso de desmineralización y remineralización

Figura 1. La caries como proceso de desmineralización y remineralización. a) Las bacterias promotoras de caries, como Streptococcus mutans, se alimentan de los azúcares presentes en el medio oral y producen ácido. Las altas concentraciones de esos ácidos favorecen la desmineralización, proceso en el que el esmalte pierde minerales como calcio y fosfatos. De esta manera se van debilitando las piezas dentarias y se dan caries o fracturas. b) En ausencia de bacterias como S. mutans y, por ende, de altas concentraciones de ácidos, la saliva promueve el proceso de remineralización en donde le proporciona al esmalte los minerales necesarios para mantener su dureza y evitar la caries.
Crédito: elaboración propia.

El tratamiento tradicional de la caries consiste en usar materiales obturadores o empastes, como comúnmente se conocen. Este tratamiento no está enfocado de manera directa contra los factores causales y sólo prolonga el desequilibrio. En la actualidad, han surgido nuevos enfoques preventivos y terapéuticos que buscan modificar el riesgo de caries y promover el equilibrio en la cavidad oral, sin efectos adversos. Los prebióticos son un claro ejemplo de ello (Zaura, 2019).

Prebióticos orales

El término prebiótico fue introducido por primera vez en 1995, como un “ingrediente alimenticio no digerible que afecta beneficiosamente al huésped al estimular selectivamente el crecimiento y/o actividad de una o un número limitado de bacterias que ya residen en el colon” (Gibson y Roberfroid, 1995). La definición se ha adaptado varias veces, y la actualización más reciente caracteriza a los prebióticos como una “sustancia que es utilizada selectivamente por los microorganismos del huésped que confieren un beneficio para la salud” (Davani-Davari, 2019). En palabras simples, podemos decir que los prebióticos son el alimento de los microorganismos benéficos que habitan la cavidad oral e intestinal. Para que un ingrediente o alimento pueda considerarse como prebiótico debe cumplir los siguientes requisitos: a) no ser hidrolizado1 o absorbido en el tubo digestivo superior, b) ser resistente a la acidez gástrica, a la hidrólisis por enzimas digestivas y no absorberse en el intestino delgado y c) ser capaz de inducir efectos fisiológicos beneficiosos para la salud.

En la odontología, específicamente en el manejo de caries y desmineralización, los prebióticos deberían ser nutrientes para bacterias que inhiban microorganismos productores de ácidos (Zaura E, 2019). En este sentido, la urea y arginina son prebióticos potenciales para la cavidad oral pues, al ser ingeridas por algunas bacterias orales, hay una producción de amoníaco, que regula la acidez en la cavidad oral y la lleva a un valor óptimo (pH cercano a 7). Con este pH se ve favorecida la remineralización dental.

También se pueden encontrar algunas otras sustancias prebióticas como el Xilitol, el cual ha sido ampliamente investigado y comercializado en productos para el cuidado oral. Además, de manera reciente, estudios en laboratorio han descrito nuevas sustancias candidatas a ser un prebiótico oral: los nitratos y algunos azúcares. como los galactooligosacáridos (gos) y los fructooligosacáridos (fos), que han mostrado un efecto inhibitorio contra el S. mutans. A continuación, hablaremos de algunos nutrientes que actúan como prebióticos orales. Asimismo, en la tabla 1, se pueden observar las características de los prebióticos orales, su principal fuente natural, presentación comercial, mecanismo de acción, ventajas e indicaciones.



Tabla 1. Principales prebióticos orales

Principales prebióticos orales
Prebiótico Arginina Polialcoholes (Xilitol, Sorbitol, Maltitol y Eritritol) Nitratos GOS y FOS
Fuente natural Pollo, pavo, frutos secos, garbanzos, lentejas, etcétera Frutas, verduras y alimentos fermentados Frutas, verduras y carnes curadas, principalmente el betabel Frutas, verduras y leche materna
Productos comerciales
  • Colgate Sensitive® Pro-Alivio™
  • Colgate ® Neutrazúcar™
  • Xylitol / Edulcorante ®
  • Xyli-white / Pasta Dental ®
  • Eritritol Puro / Healthy super foods®
  • Trident ® XtraCare / goma de mascar
  • NARTEX
  • /Suplemento alimenticio ®
  • Jarrow Formulas, Xos+gos® / Tabletas masticables
  • Probiokids Biomiral ®/ Tabletas masticables
Mecanismo de acción Sirve de alimento para las bacterias benéficas, se produce amoniaco y se regula el pH salival a un valor óptimo Las bacterias orales no fermentan este tipo de azúcares y, por lo tanto, no hay producción de ácido en la boca Limita el crecimiento de bacterias cariogénicas, y regula el pH salival a un valor óptimo No son degradados y absorbidos por las bacterias orales
Beneficios
  • Reduce bacterias cardiogénicas
  • Aumenta las bacterias benéficas
  • Promueve la remineralización
  • Reduce bacterias cardiogénicas
  • Aumenta las bacterias benéficas
  • Promueve la producción de saliva
  • Reduce bacterias cardiogénicas
  • Aumenta las bacterias benéficas
  • Control de la presión sanguínea
  • Actividad antimicrobiana
  • Reduce bacterias cariogénicas
Uso sugerido
  • En pacientes con caries pequeñas
  • Cuando exista sensibilidad dental
  • Mancha blanca2
  • En toda la población
  • Pacientes diabéticos
  • Pacientes que producen poca saliva (goma de mascar con xilitol)
  • En toda la población
  • En pacientes hipertensos
  • Pacientes con gingivitis y periodontitis
  • Niños y lactantes
  • Complementar con probióticos
Contraindicado
  • Pacientes con periodontitis
  • Evitar una administración prolongada
  • Pacientes con síndrome intestino irritable
N/D N/D

N/D. No hay dato.
Crédito: elaboración propia con información recopilada de los diferentes artículos citados.

Arginina

La arginina es un compuesto que obtenemos a partir de la dieta. Generalmente está presente en alimentos de origen animal. Podemos encontrarla en la saliva de manera natural y adicionalmente puede ser administrada vía oral, ya sea en pastillas, enjuagues o pastas dentales (Nascimento, 2019). Se ha demostrado que la arginina como prebiótico de la cavidad oral logra restaurar el equilibrio, ya que diferentes bacterias asociadas a la salud oral como el Streptococcus oralis y el Streptococcus dentisani se alimentan de ella y producen compuestos como el amoniaco, que regula la acidez de la cavidad oral y promueve un aumento de las bacterias benéficas, reduce las bacterias promotoras de caries y además permite que se realice la remineralización del esmalte (ver figura 2; López-López, 2017).

Arginina como prebiótico oral

Figura 2. La arginina como prebiótico oral. a) En ausencia de microorganismos benéficos, o si está presente en bajas proporciones, la arginina no genera un efecto de neutralización, por consiguiente, hay altas concentraciones de ácido y daño del esmalte. Éste sería el escenario perfecto para la proliferación de microorganismos cariogénicos como el S. mutans. b) Cuando la arginina está disponible (a partir de la dieta o como resultado de la suplementación) se establecen microorganismos benéficos en las superficies de los dientes. La acidez causada puede neutralizarse mediante la producción de amoniaco, lo que mantiene el pH oral cerca de la neutralidad y a su vez promueve la remineralización.
Crédito: elaboración propia.

Polialcoholes

Se tratan de carbohidratos con un grupo alcohol. Estos compuestos son los prebióticos orales más estudiados y con mayor evidencia científica que apoya su uso. Son empleados en la industria alimentaria como edulcorantes; los más usados son xilitol, sorbitol, maltitol y eritritol. La diferencia que guardan con los azúcares convencionales es que no sirven de alimento para las bacterias orales que producen ácidos, por lo tanto, no contribuyen a la caries (Takeuchi, 2019). Además, tienen otras propiedades prebióticas: pueden estimular la salivación (promueven la remineralización) y tienen efectos inhibidores específicos sobre S. mutans, principal bacteria promotora de caries (ver figura 3).

Beneficios en la cavidad oral al ingerir polialcoholes

Figura 3. Beneficios en la cavidad oral al ingerir polialcoholes. Se muestran los beneficios que se obtienen al ingerir polialcoholes en comparación con los azúcares convencionales, los cuales sirven de alimento para las bacterias cariogénicas.
Crédito: elaboración propia.

Nitratos

Los nitratos se obtienen de la dieta, principalmente de frutas y verduras. Estos son masticados y trasformados en otras moléculas como el nitrito y óxido nítrico, que generan múltiples beneficios en la salud oral (ver figura 4). El óxido nítrico es una molécula antimicrobiana que podría limitar el crecimiento de microorganismos malos. El nitrito se puede convertir en amoníaco y con esto se logra alcanzar un pH óptimo y así promover la remineralización. Algunos estudios han mostrado que los nitratos promueven un aumento de microorganismos asociados a la salud oral, mientras que los géneros como Streptococcus, Veillonella y Oribacterium, asociados con la caries, disminuyen, al igual que géneros como Porphyromonas y Fusobacterium, vinculados a enfermedades en encías (gingivitis) o en tejidos que dan soporte a los dientes (periodontitis) (Rosier, 2020). Los nitratos no sólo estarían generando beneficios en la cavidad oral, se ha descrito que ayudan en la regulación de la presión sanguínea y que además son antimicrobianos a nivel gastrointestinal (Vanhatalo, 2018).

Beneficios de una dieta rica en nitratos para la salud oral

Figura 4. Beneficios de una dieta rica en nitratos para la salud oral. Este tipo de dieta permite que en la cavidad oral estén disponibles compuestos como el nitrito y óxido nítrico, los cuales generan efectos potenciales como el aumento de bacterias asociadas a la salud y una disminución de aquellas asociadas a la enfermedad.
Crédito: elaboración propia.

Galactooligosacáridos (GOS) y Fructooligosacáridos (FOS)

Se trata de azúcares que se encuentran de manera natural en frutas y verduras, así como en la leche materna. Se emplean como prebióticos gastrointestinales y han adquirido una gran importancia por los beneficios que confieren; incluso se administran a través de fórmulas infantiles. En la odontología, a través de estudios de laboratorio, se ha demostrado que gos y fos son capaces de disminuir el crecimiento de S. mutans cuando se aplican junto con los probióticos (microorganismos benéficos) L. acidophilus. Podrían tratarse de los prebióticos orales del futuro (Nunpan, 2019).

Prebióticos y salud oral

Los principales compuestos prebióticos en la cavidad oral se obtienen a partir de una dieta equilibrada. Sin embargo y desafortunadamente, esa dieta no es la que se da en la mayoría de los individuos, por lo que surge la importancia de que el odontólogo conozca del tema, para que informen a sus pacientes y ellos puedan ver los potenciales beneficios de una alimentación balanceada para la salud oral. Dichos beneficios pueden ser explotados para lograr el mantenimiento o el restablecimiento del equilibrio en la cavidad oral, lo que implica nuevas alternativas para reducir problemas de salud oral, como la caries y las enfermedades periodontales, como la gingivitis y la periodontitis.

Es sumamente importante recordar que la odontología debe ser personalizada: se deben de tomar en cuenta las características únicas de cada individuo para determinar el tratamiento o estrategia preventiva a seguir. Si se tratara de un individuo disciplinado, con una buena higiene oral y una dieta balaceada, probablemente se podría omitir el uso de prebióticos, aunque los beneficios de la dieta podrían ser mejorados con la adecuada administración de microorganismos benéficos (probióticos), como un complemento. En el caso de pacientes con malos hábitos alimenticios, el odontólogo podría hacer recomendaciones para el cambio de dieta y, de ser necesario, la administración de suplementos y productos que contengan al compuesto prebiótico, siempre en acuerdo con las recomendaciones de uso y trabajando de la mano con el nutriólogo.

Conclusión

El empleo de prebióticos para la prevención de la caries en odontología es limitado; sin embargo, se espera que en poco tiempo sea una práctica común entre los odontólogos. Asimismo, es indispensable que la población sea informada sobre los beneficios que los prebióticos tienen en la salud oral y sistémica.

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Recepción: 22/08/2022. Aprobación: 16/05/2023.

Vol. 24, núm. 4 julio-agosto 2023

Obesidad infantil: influencia de la nutrición y el estrés materno

María de Lourdes Daza Ortiz, Marcos Francisco Rosetti Sciutto y Andrea Díaz-Villaseñor Cita

Resumen

La obesidad es un problema creciente en niños y niñas, incluso desde temprana edad, con repercusiones en su salud en la vida adulta. Además de la alimentación y la falta de actividad física, el estrés durante el embarazo también puede predisponer al sobrepeso. La teoría de la programación fetal sugiere que el estrés crónico en las madres puede afectar el desarrollo del feto y aumentar el riesgo de obesidad infantil. La pandemia de covid-19 ha generado altos niveles de estrés en mujeres embarazadas debido a la reducida movilidad y el temor al virus. En este artículo, exploramos los efectos del estrés en relación con la obesidad y presentamos estrategias para controlarlo. Es fundamental comprender estos aspectos para proteger la salud de las madres y sus bebés. A través de la comunicación, el apoyo familiar y el cuidado profesional, es posible mitigar los efectos negativos del estrés durante el embarazo y promover un desarrollo saludable.
Palabras clave: obesidad, estrés prenatal, programación fetal, salud materno-infantil, covid-19.

Childhood obesity: the influence of nutrition and maternal stress

Abstract

The obesity problem is increasingly serious, with growing prevalence rates. A concerning issue is the levels of obesity in boys and girls, even before the age of 5, particularly because this condition will bring a multitude of health problems in their adulthood. Besides excessive food intake and lack of physical activity, there are factors that can predispose to overweight even before birth. One of them is the stress experienced by the mother during pregnancy. Although stress is generally a mechanism that provides advantages by warning and helping to navigate unpleasant situations, chronic stress in pregnant women can influence fetal development. According to the fetal programming hypothesis, negative environmental conditions can alter development and predispose individuals to suffer from childhood obesity. The covid-19 pandemic exemplifies a source of chronic stress. Specifically, pregnant women may experience higher stress levels due to reduced mobility, family environment, fear of contracting the virus, etc. In this article, we not only outline some of the stress-related effects on obesity but also strategies to control it.
Keywords: obesity, prenatal stress, fetal programming, maternal and child health, covid-19.

La obesidad en la cotidianidad

En cualquier paseo por la calle, es común observar a niños, incluyendo a pequeños de 3 o 4 años, que padecen sobrepeso u obesidad. Es posible que inclusive no tengas que salir de casa, quizás tengas algún familiar que sufra de alguna de estas condiciones. ¡Incluso podrías estar experimentando tú mismo sobrepeso u obesidad! Uno de los factores que actualmente se está explorando es la relación entre el estrés experimentado durante momentos críticos del desarrollo intrauterino, es decir, durante la gestación, y el riesgo de obesidad infantil.

¿Cómo identificar la obesidad y el sobrepeso?

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (oms), la obesidad se define como la acumulación anormal o excesiva de grasa que resulta perjudicial. Sin embargo, hablar de lo que se considera “anormal” o “excesivo” puede resultar confuso. Para evaluar la cantidad de grasa en nuestro organismo, se utiliza el Índice de Masa Corporal (imc), que se obtiene dividiendo el peso de una persona en kilogramos entre su estatura al cuadrado en metros. Aunque este índice es imperfecto y puede no ser adecuado para personas muy altas o muy bajas, su cálculo sencillo permite realizar una evaluación rápida. En adultos, un imc igual o superior a 25 se considera sobrepeso, mientras que un imc de 30 o más se clasifica como obesidad. El rango considerado como ideal se encuentra entre 18.5 y 24.9.

En el caso de niños y adolescentes de 2 a 17 años, el cálculo del imc se realiza de la misma manera que en adultos, pero su interpretación varía debido a los cambios en el peso y la estatura que ocurren con la edad. El imc en esta población se expresa en percentiles, en comparación con otros niños del mismo sexo y edad, utilizando tablas de crecimiento. Para encuestas nacionales, se considera que los menores de cinco años tienen sobrepeso cuando el indicador se sitúa por encima de una desviación estándar por encima del promedio de imc para esa edad, según el patrón de referencia de la oms de 2007. Por otro lado, se considera obesidad cuando el indicador se encuentra por encima de dos desviaciones estándar del promedio. Estos valores se obtienen utilizando el patrón de referencia de la oms de 2006 y 2007 (Shamah-Levy, 2022).

En las últimas décadas, se ha observado un aumento en la prevalencia mundial de personas con sobrepeso u obesidad. En México, se sabe que la prevalencia combinada de sobrepeso y obesidad en niños menores de 5 años es del 7.8%, siendo mayor en áreas urbanas (8.6%) que en áreas rurales (5.5%). En cuanto a los infantes de 5 a 11 años, la prevalencia nacional de sobrepeso es del 18.8% (16.6% en niños y 21.2% en niñas), mientras que la prevalencia de obesidad en esa misma franja de edad es del 18.6% (23.8% en niños y 13.1% en niñas) (Shamah-Levy, 2022). Es interesante destacar que la prevalencia de sobrepeso, obesidad y la combinación de ambos difiere según el tipo de localidad, siendo mayor en las zonas urbanas, y con mayor prevalencia en niños en el caso de la obesidad y la combinación (Shamah-Levy, 2022). Estos datos se pueden observar de manera más clara en la tabla 1. La mayor prevalencia de obesidad infantil en áreas urbanas en comparación con las rurales podría estar relacionada con el mayor estrés experimentado por las personas que viven en entornos urbanos.

Tabla 1. Prevalencia de sobrepeso, obesidad y prevalencia combinada de sobrepeso y obesidad en infantes de 5 a 11 años de edad, estratificadas por tipo de localidad (rural y urbana) y por sexo

Tipo de Localidad Sobrepeso (%) Obesidad (%) Sobrepeso + obesidad (%)
Rural Niños 15.6 22.2 37.9
Niñas 14 6.8 20.8
Total 14.9 14.9 29.7
Urbana Niños 17 24.3 41.3
Niñas 23.6 15.2 38.8
Total 20.2 19.9 40.1

Crédito: Shamah-Levy et al, 2022.

Recibir un diagnóstico de obesidad es una mala noticia, ya que aumenta el riesgo a corto, mediano y largo plazo de desarrollar otras enfermedades como diabetes, síndrome metabólico, presión arterial alta, enfermedades del corazón, ciertos tipos de cáncer y trastornos del sueño (Gregory, 2019). Además, conlleva un mayor riesgo de enfermar gravemente al contraer el virus sars-CoV-2, causante de la pandemia por covid-19 que estamos viviendo.

Foco rojo: obesidad infantil

Es ampliamente conocido que las principales causas del sobrepeso y la obesidad son el consumo frecuente y excesivo de alimentos procesados, que son ricos en carbohidratos, altos en grasa, bajos en fibra y con bajo valor nutricional. Esto se suma al sedentarismo, es decir, la falta de actividad física diaria, prefiriendo formas de entretenimiento e interacción social a través de videojuegos o teléfonos móviles. Sin embargo, existen otros factores que contribuyen al sobrepeso y la obesidad y que no están relacionados con nuestras conductas o decisiones, sino con eventos que ocurrieron antes de nuestro nacimiento. Durante el desarrollo en el vientre materno, el feto es sensible al estado emocional y a la alimentación de la madre (Lamichhane et al., 2020), lo cual puede influir en la aparición de sobrepeso y obesidad en la infancia.

¿Qué se entiende por “estrés”?

Dentro de la comunidad científica ha habido debates en torno a cuándo el estrés deja de ser una respuesta beneficiosa para las personas y se convierte en algo perjudicial, y esta discusión continúa. Desde una perspectiva biológica, el estrés es parte de la adaptación de un individuo a su entorno, ya que activa una respuesta crucial ante situaciones nuevas, importantes y/o potencialmente peligrosas y amenazantes, donde la hormona cortisol juega un papel fundamental (Khoury et al., 2019). Sin embargo, el estrés también puede tener aspectos negativos en las personas si se mantiene activo durante períodos prolongados o se activa en respuesta a estímulos que no necesariamente están presentes ni son inmediatos. A diferencia de una cebra en la sabana africana que experimenta estrés al notar la presencia de un león, los seres humanos podemos experimentar estrés en situaciones que no representan un peligro inminente para nuestra integridad física. El estrés nos permite responder a las demandas del entorno y, por lo tanto, se considera una respuesta adaptativa y beneficiosa, pero el problema surge cuando se activa de manera constante y prolongada, ya que puede tener un impacto negativo en la salud física y mental de los individuos.

Estrés en la mujer y sus consecuencias en el embarazo

En la actualidad, el estado emocional de las mujeres está fuertemente influenciado por la sobrecarga de responsabilidades asociadas a las expectativas sociales (ver figura 1). Existen múltiples razones, desde aspectos biológicos hasta culturales, que contribuyen a que las mujeres reporten niveles más altos de estrés crónico en comparación con los hombres (Matud, 2004). Tomemos en consideración una de las condiciones únicas de las mujeres: el embarazo. Durante este período, muchas mujeres experimentan un estrés amplificado debido a las nuevas emociones y los cambios biológicos que acompañan esta transición hacia la maternidad. Además, estas circunstancias pueden estar agravadas por factores psicosociales como la pobreza, la violencia, las demandas laborales, el desempleo, entre otros.



Mujer con carriola e hija

Figura 1. Mujer con carriola e hija. En México, el cuidado de los hijos frecuentemente es una labor que asimétricamente realizan las mamás.
Crédito: Openverse.

Es importante tener en cuenta que uno de los cambios característicos del embarazo se relaciona con los hábitos alimentarios, que incluyen modificaciones en la percepción del gusto, antojos por ciertos tipos de alimentos y aversión hacia otros, así como un aumento excesivo del apetito (Sebastiani et al., 2020). El embarazo implica cambios tanto biológicos como psicológicos que pueden generar alteraciones en la frecuencia cardíaca, el metabolismo —especialmente el de la glucosa y la insulina), la circulación sanguínea, los trastornos del sueño, la alimentación y el estado de ánimo. Además, durante el embarazo se produce una resistencia natural a la insulina por parte de la madre. Si bien esta resistencia forma parte de una protección natural para el feto asegurando una recepción de los nutrientes necesarios para él, también predispone a la madre a desarrollar obesidad, lo que puede afectar la salud del bebé.

Ahora, imaginemos el panorama completo: es normal que una mujer embarazada experimente estrés debido a los cambios que su cuerpo está experimentando y al hecho de saber que dentro de ella se está desarrollando una nueva vida que depende de ella. Además, debemos considerar el contexto actual de la pandemia de covid-19 como una fuente constante de estrés (ver figura 2). Durante esta crisis sanitaria, las mujeres embarazadas se encuentran entre las personas con mayor riesgo de experimentar formas graves de covid-19 (Corbett et al., 2020). No solo han enfrentado muchos de los desafíos emocionales propios del embarazo, sino que también lo han hecho en medio de un aislamiento social.



Afiches del programa “Quédate en casa”

Figura 2. Afiches del programa “Quédate en casa” para disminuir los contagios por COVID-19.
Crédito: Wikimedia commons.

La nutrición y el estado emocional en el embarazo

Cuando nos encontramos bajo mucho estrés, algunos tendemos a comer en exceso, especialmente alimentos ricos en grasas y carbohidratos. Esto puede resultar en un aumento de peso y un funcionamiento inadecuado del metabolismo. De manera similar, cuando estamos emocionalmente alegres, utilizamos la comida como una forma de celebración y la vemos como una recompensa. En cuanto al aspecto social de la alimentación, en la cultura mexicana, erróneamente, se utiliza la comida como un castigo o un premio. Del mismo modo, las mujeres embarazadas tienen la falsa creencia de que necesitan “comer por dos”.

El estrés no solo afecta la elección de los alimentos, sino también cómo nuestro cuerpo los procesa. Cuando comemos en condiciones de estrés, la hormona cortisol bloquea la acción de la insulina, y en lugar de que las células metabolizen la glucosa, esta permanece disponible para hacer frente a la causa del estrés. Sin embargo, tener niveles altos de glucosa en la sangre de manera prolongada y constante se asocia incluso con el desarrollo de diabetes (Malone y Hansen, 2019).

Ahora podemos entender por qué el estado nutricional de la madre embarazada tiene un impacto directo en la salud del bebé. En efecto, se ha observado que los bebés de mujeres con obesidad son significativamente más pesados y grandes en comparación con los bebés de mujeres sin obesidad. Estos bebés también presentan niveles más altos de leptina, una hormona que señala al cerebro en condiciones normales que ya no tenemos apetito, pero cuando se eleva mucho se pierde esta señal y por lo tanto nunca se genera la saciedad (Zhu, Cao y Li, 2019). El exceso de calorías al que el bebé está expuesto en el útero “programa su metabolismo” a través de cambios epigenéticos (modificaciones químicas, como metilaciones y acetilaciones, en el material genético del bebé que regulan la expresión de sus genes) y, junto con el aumento de la cantidad de grasa corporal al nacer, los predispone a la obesidad infantil. Este fenómeno, que estudia la salud y la susceptibilidad a enfermedades en individuos desde antes de su nacimiento, se conoce como programación fetal (Seneviratne y Rajindrajith, 2022). Y se refiere a los cambios que ocurren durante el desarrollo embrionario y los primeros años de vida, los cuales están determinados tanto por la carga genética como por el entorno.

Existen casos en los que ocurre lo opuesto, como en la desnutrición. Los bebés cuyas madres experimentaron desnutrición durante el embarazo nacen con bajo peso y, con el fin de alcanzar un nivel promedio en las curvas de crecimiento, experimentan una sobre nutrición en los primeros meses o años de vida. Esto significa que la desnutrición durante el embarazo también es un factor de riesgo para el desarrollo de la obesidad infantil. Para estos bebés, lo ideal sería que reciban la cantidad de energía que su cuerpo demanda y permitir que alcancen naturalmente un crecimiento adecuado correspondiente a su edad.

¿Ahora qué sigue?

El estrés experimentado durante el embarazo puede influir en la predisposición del bebé a desarrollar obesidad. Comparte esta información con las mujeres embarazadas que conozcas. Si su estado emocional indica que están estresadas, es importante que sepan sobre las posibles repercusiones que este estado podría tener en su bienestar y en el de su bebé. Los efectos perjudiciales de la pandemia de covid-19 en la salud mental pueden mitigarse si mantenemos la comunicación con la familia y los amigos, buscamos apoyo con profesionales de la salud y participamos en terapia psicológica, que ahora también está disponible de forma virtual.

A continuación, enumeramos algunas acciones que las mujeres embarazadas pueden llevar a cabo para reducir sus niveles de estrés:

  • Organizar las actividades para poder cumplir con todas, o al menos con las más importantes, en tiempo y forma.
  • Realizar actividades placenteras y relajantes que distraigan de los problemas.
  • Practicar ejercicio moderado, ya que las endorfinas que libera el cerebro durante el ejercicio ayudan a relajarse y brindan bienestar.
  • Considerar aquellas cosas que siempre se ha querido aprender pero para las cuales nunca se ha tomado el tiempo.
  • Buscar un nuevo pasatiempo que genere interés y entretenimiento.
  • Dormir bien: el cuerpo y la mente necesitan descansar para rendir en todas las actividades diarias.

Sitios de interés

Referencias





Recepción: 16/02/2022. Aprobación: 16/05/2023.

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Revista Digital Universitaria Publicación bimestral Vol. 18, Núm. 6julio-agosto 2017 ISSN: 1607 - 6079