Vol. 19, núm. 3 mayo-junio 2018

SkyMeAPP: un proyecto de ciencia ciudadana
para el estudio de la contaminación lumínica

Héctor Antonio Solano Lamphar Cita

Resumen

La contaminación lumínica es un problema ambiental de reciente estudio a nivel mundial y que afecta no sólo la realización de actividades astronómicas, sino que también tiene impactos biológicos en organismos fotosensibles, incluyendo al ser humano. El proyecto SkyMeAPP se realiza con el objetivo de contribuir al estudio de la contaminación lumínica a nivel mundial por medio del alcance que permite la ciencia ciudadana. Lo anterior, mediante tres ejes principales: recabar información para la investigación, generar una vinculación entre el público en general y la comunidad científica, y generar un interés del público en general con respecto a este tipo de contaminación.
Palabras clave: contaminación lumínica, ciencia ciudadana, desarrollo de aplicaciones.

SkyMeAPP: A citizen science project for the study of light pollution

Abstract

Light pollution is a global environmental issue, which affects not only astronomical activities, but in addition, that has biological effects on all photosensitive organisms, including humans. The SkyMeAPP project has the aim of contributing to the worldwide study of light pollution, through the advantages of citizen science. Specifically, it follows three main goals: to gather data for research; to generate networks among the general public and the scientific community; to bring attention of society regarding light pollution.
Keywords: light pollution, citizen science, app development.

Introducción

La luz artificial comprende un complejo sistema urbano destinado a mantener a las ciudades iluminadas para que sea posible realizar actividades nocturnas en un mundo altamente industrializado. Sin embargo, durante más de una década, la iluminación artificial nocturna excesiva ha sido reconocida como un problema ambiental que ha llevado a la necesidad de formulación de prioridades de investigación para combatir la contaminación lumínica (CL). (Longcore and Rich, 2004; Navara and Nelson, 2007; Solano Lamphar, 2010; Falchi et al., 2011; García Gil et al., 2012; Gaston et al., 2013; Pawson and Bader, 2014).

La degradación ambiental que produce la CL se ve representada en diferentes aspectos que requieren de especial cuidado y en una necesidad de un enfoque integral que permita una correcta obtención de datos para su estudio. Además de los ya conocidos efectos producidos en la astronomía, existen otros que requieren de mayor atención. La iluminación nocturna artificial afecta a aquellos organismos con patrones de vida nocturna como migración, nutrición, reproducción e interacción colectiva (Moore et al., 2001; Vera et al., 2010; Fox, 2012; Cho et al., 2015; Solano Lamphar and Kocifaj, 2015); y a los servicios eco sistémicos (Lyytimaki, 2013), por favor véase la Figura 1.




Figura 1. Esquema de la contaminación lumínica y los efectos de la misma en su interacción con la atmosfera.

Asimismo, debido a que la visión es el mecanismo fisiológico más utilizado por los seres humanos (Solano lamphar, 2006), la CL representa una gran afectación a los procesos biológicos humanos, que incluyen afectaciones a la correcta segregación de melatonina; una hormona de vital importancia para disminuir la proliferación de distintas células cancerígenas (tales como las asociadas con el cáncer de mama en mujeres y cáncer de próstata en hombres (Anisimov, 2003; Solano Lamphar y Kocifaj, 2013).

Comprender todos los impactos ambientales que produce la luz nocturna artificial requiere vincular el conocimiento adquirido de más de un siglo de investigación experimental con un conocimiento de la intensidad, distribución espacial y composición espectral de la luz en el ambiente nocturno. En este sentido, se presta especial atención a la óptica de la atmósfera terrestre y a las interacciones entre la luz y las partículas suspendidas a nivel de la tropósfera. Básicamente, la óptica atmosférica redistribuye los patrones de emisión de la luz que se transforman a lo largo de la trayectoria de los fotones por diferentes capas atmosféricas (Seinfeld y Pandis, 2016; Alvarado et al., 2016; Kerker, 2016). Como consecuencia, las distribuciones de la CL se distorsionan de una manera compleja dependiendo de muchos factores.

Sin embargo, además de la atmósfera, los cambios temporales y espaciales de la CL están determinados por la función de emisión de las fuentes de luz artificial terrestres (Garstang, 1986; Cinzano y Castro, 1998, Aubé et al., 2005, Luginbuhl et al., 2009, Kocifaj y Solano Lamphar, 2014). Las características de la CL varían significativamente con el tipo de luz artificial y, en particular, con las características angulares de su patrón de emisión. (Kocifaj et al., 2015; Solano Lamphar y Kocifaj, 2016; Kocifaj y Solano Lamphar, 2016). Junto con la atmósfera, los cambios temporales y espaciales de una fuente de luz están determinados por la función de emisión de las fuentes de luz terrestre. Entendiéndose que la parte principal de esta función es un efecto colectivo de las funciones elementales de emisión de todas las luces artificiales privadas y públicas que se distribuyen en el área estudiada. Básicamente, cada fuente de luz puede caracterizarse por una función de emisión diferente y no existe una función de emisión estándar.




Figura 2. Representación de la función de emisión en sus diferentes caracterizaciones. F es la fracción de luz emitida directamente a la atmósfera, G es la fracción de luz reflejada en la superficie terrestre y posteriormente emitida a la atmósfera.

Desafortunadamente, los análisis teóricos o experimentales de las características de la función de emisión son extremadamente difíciles de obtener, debido tanto a la falta de dispositivos de medición altamente especializados, como a la carencia de datos estadísticos que representen la cantidad de iluminación pública y privada con que cuenta una urbanización. Las propiedades ópticas del medio ambiente atmosférico se encuentran en continuo cambio. No obstante, la función de emisión de las fuentes contaminantes solamente se altera cuando es modificado el sistema de iluminación artificial.



Figura 3. Esquema general de la APP.

En la mayoría de las ciudades, se tienen datos del tipo y cantidad de iluminación pública, debido a que su infraestructura y mantenimiento es responsabilidad gubernamental (Hölker et al., 2010; Ryu y Lee, 2015; Morgan-Taylor, 2015; Song & Li, 2017). Sin embargo, los datos sobre la iluminación privada se desconocen. Y, por lo tanto, los teóricos de la CL representan la función de emisión de una manera limitada que se ve sólo caracterizada por el conocimiento de la iluminación pública. El estudio teórico-experimental de dicha función es necesario y favorable, y es una fuente de motivación para proponer el presente proyecto con el que se podrá tener una configuración real para cada fuente, desarrollando una correcta simulación bajo diferentes condiciones atmosféricas. Para esto, se propone crear una aplicación que permita al público en general apoyar a la investigación científica sobre la CL generando al mismo tiempo un acercamiento a la misma y fomentando el interés por los distintos esfuerzos que se han realizado hasta la fecha por controlar este tipo de contaminación a nivel mundial (ver Figura 3).

Argumento metodológico

Esquema del equipo de desarrollo de la aplicación

El proyecto en sus distintas etapas y partes que lo conforman ha presentado distintos retos y objetivos. Se pueden identificar cinco equipos de trabajo diferentes (ver Figura 4):



Figura 4. Esquema de trabajo del desarrollo de la APP.

El equipo A y B forman parte de la programación y diseño de la aplicación. El equipo A tiene por objetivo la programación y funcionamiento de la aplicación destinada a la clasificación de fotografías. Está formado por un grupo de científicos intersdisciplinario e internacional que realizó la programación conforme a los modelos teóricos y a consideraciones científicas fundamentadas en publicaciones robustas. El equipo B tiene por objetivo la programación y funcionamiento de la aplicación destinada al funcionamiento geolocalizado del dispositivo, así como de la interrelación con otros usuarios con respecto a su posición.

El equipo C tiene por objetivo específicamente el diseño e ilustración de la aplicación en general, así como su divulgación en redes sociales y posicionamiento entre usuarios.

El objetivo del equipo D es asegurar el correcto funcionamiento de la información recabada así como el de dar mantenimiento y actualización al servidor que forma parte del proyecto.

En el sitio web destinado al proyecto (ver Figura 6) convergen no solamente los usuarios y la comunidad científica que consulta la información recabada, sino todos los demás actores que se hayan sumado al proyecto. El objetivo del equipo E es generar conexiones interinstitucionales y académicas entre los distintos actores de investigación y no-acadaémicos con el fin de fortalecer el vínculo entre la sociedad y la investigación.

Metodología de SkyMeAPP

El proyecto SkyMeAPP es un proyecto de ciencia ciudadana, por lo que depende fundamentalmente de la convergencia y participación del público en general y la comunidad científica internacional para lograr los objetivos generales y particulares. Por lo tanto, se contemplan dos esfuerzos que le dan el soporte al proyecto: un sitio web y la creación y difusión de la aplicación para dispositivos móviles SkyMeAPP (ver Figura 5).



Figura 5. Esquema metodológico de la APP.

Alineado a los esfuerzos institucionales sobre el Día Internacional de la Luz, el sitio web es un espacio digital de convergencia entre los actores del proyecto: instituciones académicas, organismos no gubernamentales, comunidad científica, público en general y los usuarios de la aplicación SkyMeAPP. La página de internet funcionará en tres ejes: difusión de contenido científico internacional relacionado a la CL, vinculación interinstitucional y académica, interrelación y protagonismo de usuarios de la aplicación (ver Figura 6).




Figura 6. Ventana principal de la página web de la aplicación SkyMeAPP.

Por otra parte, la herramienta principal del proyecto es una aplicación móvil que es capaz de proporcionar a la comunidad científica de información útil, obtenida a partir de fotografías tomadas con cualquier dispositivo de datos celulares, para el estudio de la CL y temas relacionados. La aplicación está conformada en su funcionamiento en dos grandes rubros: la clasificación de fotografías georreferenciadas y la interfaz de uso.

La interfaz, basada en la visualización de la geolocalización del dispositivo, tiene dos objetivos primordiales. El primero, llevar a los usuarios a trabajar en equipo y generar una comunidad interesada en el uso de la aplicación. El segundo, indicar a los usuarios sobre el estado de CL de su ciudad o región con el fin de obtener la mayor información de distintos lugares y permitir que el usuario reconozca el nivel de contaminación en el que se encuentra localizado.

La figura 7 muestra la página principal de la interfaz móvil SkyMeAPP, con los íconos que abrirán todas las posibilidades de la aplicación. Se puede observar que en la página principal se encuentran los íconos básicos, los más importantes; es decir, los que nos darán la información que debe procesar una APP de ciencia ciudadana a través del envío de datos a un servidor preparado para recibirlos. Posteriormente, por medio de links de la misma aplicación, se encuentran las partes de información, el tutorial de uso y las políticas de privacidad que permitirá proteger al usuario por medio de técnicas de gobernanza de datos.


sky me

Figura 7. Página principal de la aplicación SkyMeAPP.

Observando la figura 7, y considerando los Íconos de izquierda a derecha: 1 Start, inicia la toma de fotografías y los emoticones de sensaciones del usuario. 2 LP, indica al usuario la cantidad de CL que tiene en el lugar de las mediciones. 3 ícono central, dirige al usuario hacia la política de privacidad, contacto para recomendaciones y registro de usuario. 4 HIW, una guía rápida visual del uso de la APP. 5 Info, explica al usuario los objetivos de la APP, información sobre CL y sus efectos, comunicación sobre el Día Internacional de la Luz, un tutorial más avanzado y diferentes links para que el usuario pueda descargar, gratuitamente, artículos científicos que tratan el tema de la CL.

Clicando en el primer ícono, Start, el usuario se acerca a una fuente de luz y se toma una fotografía que posteriormente nos permitirá medir los luxes emitidos. Lo anterior se logra accediendo a la cámara del dispositivo celular y utilizándola teóricamente como medidor fotométrico. Se le pide al usuario que la fuente de luz se situé en un cuadrado de la cámara programado con tal fin. Lo anterior para evitar que la fotografía quede fuera de los ejes de toma. El usuario tiene la posibilidad de observar la fotografía tomada antes de enviarla (ver Figura 8). Al clicar en send el dato se envía georreferenciado a nuestro servidor.




Figura 8. Página del análisis visual de la fotografía antes de ser enviada.

Una vez que la fotografía sea enviada, aparecerán diferentes emoticones que permitirán establecer la influencia del alumbrado urbano sobre la población (ver Figura 9). Es decir, el usuario tiene la posibilidad de comentar sobre sus sensaciones bajo la iluminación en la que se encuentra, con el fin de determinar qué efectos psicológicos tiene la iluminación nocturna en el usuario. Con la amable colaboración del usuario, podremos hacer un análisis global de la respuesta emocional que la iluminación nocturna produce en la población. Esa información se enviará georreferenciada a nuestro servidor, y con la misma será posible hacer recomendaciones importantes para generar políticas públicas sobre este aspecto.




Figura 9. Página en donde el usuario podrá comentar sobre la respuesta emocional percibida por la luz ambiental.

Clicando en el segundo ícono de la parte inferior, LP, el usuario tiene la posibilidad de conocer un aproximado de CL en su área. La medición se realiza utilizando un mapa global de la CL que fue desarrollado por el científico esloveno, colaborador del proyecto SkyMeAPP, Jurij Stare (ver Figura 10). La medición se obtiene automáticamente en diferentes unidades; mag/arcsec2 (medición astronómica de la CL) y luminancia en cd/m2, pero también se indica un nivel de la escala Bortle (escala que permite conocer diferentes niveles de contaminación). De esta manera, el usuario conoce la cantidad de contaminación que se tiene y que tan alta o baja se encuentra con respecto a las condiciones normales que se deberían tener.




Figura 10. Página en donde el usuario podrá reconocer el nivel de contaminación lumínica en su punto de observación.

Un elemento importante de la aplicación, y de interés al usuario, se representa en íconos especiales que darán información sobre el Día Internacional de la Luz, CL, permitirán al usuario descargar los artículos científicos publicados en la materia, entre otros.

Las mediciones tomadas con el dispositivo mediante la aplicación deberán cumplir con criterios de clasificación para que puedan ser consideradas automáticamente como procesables y así asegurar lo más posible que puedan ser útiles para la comunidad científica. El diseño posterior de los modelos automatizados de procesamiento así como la definición de criterios estará a cargo de un equipo científico internacional e interdisciplinario con el fin de asegurar que la información final esté, desde su concepción, lo mejor adaptada para el posterior análisis de la información.

Finalmente, como se mencionó anteriormente, una parte fundamental del funcionamiento de la aplicación es que el usuario se sienta parte de un esfuerzo internacional por abordar la CL. Por lo que, desde que la aplicación esté disponible, deben diseñarse estrategias y mecanismos para que la aplicación se conciba novedosa, actualizada y esté integrada al uso de otras aplicaciones y redes sociales. El presente proyecto de ciencia ciudadana permitirá, a los observadores individuales, ayudar a cuantificar la CL que se representará geográficamente en mapas que muestren diferentes niveles de contaminación. Asimismo, tal información podrá se utilizada para rastrear los cambios de iluminación artificial nocturna en todo el mundo.

Conclusiones

El área de influencia de la luz artificial nocturna ha aumentado rápidamente en las últimas décadas junto con el crecimiento poblacional y urbano que han experimentado las ciudades. La cantidad de CL emitida desde cualquier urbanización depende de las acciones de los individuos socializados en el interior de la comunidad, y de todas las características que conforman de la sociedad un sistema urbano (económicas, culturales, hábitos de consumo, la estructura urbana, entre otras). La variación espacial y temporal de estos factores determinan la CL resultante.

La ciencia ciudadana es un recurso muy útil para generar colaboraciones de investigación entre científicos y voluntarios. En particular es requerido para ampliar las oportunidades de recopilación de datos científicos y proporcionar acceso a la información científica para los miembros de la comunidad y el público en general. Uno de los más grandes retos del proyecto SkyMeAPP es el de lograr que el público en general se involucre y se sienta parte de un esfuerzo internacional por combatir la CL, por lo que la aplicación es sólo una herramienta que forma parte de un proyecto mayor donde convergerán no sólo usuarios sino instituciones, comunidad científica, entre otros actores involucrados.

Referencias

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A todas luces, una experiencia única entre ciencia y arte

Isaías Hernández Valencia Cita

Resumen

Este artículo tiene como objetivo presentar la experiencia que se ha vivido durante el desarrollo y puesta en marcha de las actividades del proyecto A todas luces, diálogo de saberes entre ciencia y arte; y exponer las bondades, diferencias y retos que se tuvieron al recorrer seis escuelas de nivel primaria, de primer grado a sexto grado, en diversos estados de la república mexicana. Se expondrán, también, algunas reflexiones y comparaciones con otras actividades que el Museo de la luz hace regularmente fuera de sus muros en otros contextos con propósitos específicos; para que, de esa manera, se vea la diferencia y potencialidad de haber trabajado divulgadores de la ciencia y artistas plásticos en un proyecto en común.
Palabras clave: ciencia, arte, expereincia, diálogo, divulgación de la ciencia.

A todas luces, a unique experience between science and art

Abstract

This article aims to present the experience that has been lived during the development and implementation of the activities of the project “Clearly, dialogue of knowledge between science and art”; and to expose the kindness, differences and challenges that were had when crossing six primary schools, from first grade to sixth grade, in different states of the Mexican Republic. Some reflections and comparisons with other activities that the museum regularly makes outside its walls in other contexts with specific purposes will be exposed; so that, in this way, we can see the difference and potentiality of having worked for science disseminators and plastic artists in a common project.
Keywords: science, art, expereince, dialogue, science dissemination.

Una primera reflexión entre ciencia y arte

Antes de comenzar a describir la experiencia vivida en el proyecto, quisiera aportar algunas reflexiones e ideas generales que se tienen de las disciplinas científicas y artísticas.

El arte y la ciencia son necesariamente diferentes desde el punto de vista del estudio y la difusión del saber. La ciencia intenta comprender el mundo a partir de un conocimiento acumulado en el tiempo, basándose en resultados reproducibles y en hechos demostrables y contrastados; se esfuerza en buscar la objetividad. Las humanidades, disciplinas académicas que observan la condición humana, utilizan métodos principalmente analíticos, críticos y especulativos. Las artes escénicas, visuales y literarias expresan el mundo a partir de las experiencias idiosincrásicas, la intuición, el movimiento y las metáforas. Los artistas suelen inspirarse en el pasado, pero la “verdad” de una obra de arte no se halla a través de una investigación sistemática que conduzca a hechos acumulativos y reproducibles; se trata, a menudo, de algo subjetivo y sensorial.



Arte Busca respuestas estéticas.
Está basado en la emoción y la intuición.
Es idiosincrático.
Se alimenta de la comunicación visual o sonora.
Es evocativo.
Se basa en valores que rompen tradiciones.
Ciencia Busca el conocimiento y la comprensión de todo.
Se basa en el uso de la razón.
Vive de la normativa.
Requiere una narrativa para su comprensión.
Su estrategia es explicativa.
Se alimenta de valores sistemáticos basados en la tradición y en el cumplimiento de las normas.

Tabla 1. Diferencias entre arte y ciencia.

Sin embargo, ambas disciplinas pueden llegar a estar profundamente conectadas ya que, a un nivel básico, todos nosotros exploramos fenómenos y experiencias vividas para intentar comprender la realidad y las potencialidades que pueden existir bajo ellas.

Aún más evidentes son las similitudes fundamentales compartidas por artistas y científicos. Tanto unos como otros se describen, en general, como creativos, intuitivos, disciplinados, lógicos e inspirados en sus actividades para comprender el mundo. Valoran la observación cuidadosa de sus entornos para recopilar información a través de los sentidos.

  • Aprecian la creatividad.
  • Proponen introducir cambios, innovaciones o mejoras sobre lo que existe.
  • Utilizan modelos abstractos para entender el mundo.
  • Aspiran a crear obras de relevancia universal.

Además, analizando las habilidades y estilos de vida de las personas exitosas en las artes, humanidades, ciencias y tecnología para entender qué es lo que hace que piensen creativamente, innoven y triunfen dentro, e incluso fuera, de sus disciplinas, encontramos que esas personas exhiben o exhibían el mismo conjunto de habilidades imaginativas, basta pensar en artistas como Picasso o físicos como Richard Feynman, sólo por mencionar un ejemplo.

Por otro lado, las actividades planeadas y la secuencia didáctica tienen como propósito que, en el proceso, la ciencia informe sobre el arte y ésta sobre la ciencia.

Descripción de las actividades

En el proyecto A todas luces, diálogo de saberes entre ciencia y arte se busca establecer un puente entre científicos y artistas para que guíen las inquietudes, dudas y propuestas de los niñas, niños y adolescentes, a partir de la observación, la experimentación y la reflexión de lo aprendido sobre el fenómeno de la luz y su aplicación en la creación de un objeto artístico que promueva y transmita el trabajo en equipo, la importancia de la luz para la vida, el cuidado de la naturaleza y su entorno local, el aprovechamiento del conocimiento adquirido para el desarrollo integral del ser humano en su comunidad y el desarrollo sostenible de las futuras generaciones.

Los objetivos definidos giran en torno a: 1) promover en niñas y niños el interés por conocer de dónde surge la energía solar y que encuentren un uso a ese conocimiento de conocer las explicaciones científicas de fenómenos relacionados con la luz y sus efectos sobre la vida en el planeta, 2) asociar los beneficios y aplicaciones útiles de la radiación solar a la sociedad humana, a través de actividades lúdicas, manipulación de instrumentos y experimentos sencillos, 3) Posibilitar la expresión artística de las niñas y niños desde su perspectiva social y cultural sobre el tema de la luz, 4) vincular el aspecto científico sobre la luz con el aspecto lúdico-creativo en la construcción de objetos con un sentido estético-artístico al realizar un mural o escultura colectiva, y 5) coadyuvar en el crecimiento del acervo cultural y artístico de las escuelas, al donar el objeto artístico elaborado por los estudiantes bajo la guía del artista.

El proyecto estuvo dirigido a estudiantes de educación primaria, cuyas escuelas se encuentran integradas en la Red del Plan de Escuelas Asociadas de la UNESCO. Se escogieron seis escuelas de diferentes estados de la república mexicana (ver tabla 2).



Escuela primaria Ciudad Fechas Grupos    Alumnos
C.E.I Roberto Cabral Del Hoyo. Zacatecas, Zac. Mayo 16 al 26 18 660
Escuela Práctica Anexa a la Normal Veracruzana. Xalapa, Ver. Junio 2 al 23 18 495
Escuela Primaria Francisco J. Santamaría. Villahermosa, Tab. Agosto 28 al 8 de septiembre 12 298
Escuela Urbana #96 Manuel M. Diéguez Guadalajara, Jal. Septiembre 18 al 29 12 407
Escuela Primaria Profesora Obdulia Zamora Martínez Monterrey, N.L. Octubre 2 al 13 6 149
Escuela Primaria Niños Héroes Campeche, Camp. Noviembre 13 al 24 13 436
79 2445

Tabla 2. Desglose de escuelas, estados, fechas y alumnos que se atendieron en el proyecto.

La manera en que se llevó a cabo

Para cumplir con los objetivos del proyecto, se planeó que en dos semanas se llevarían a cabo las actividades de ciencia y de arte, para posteriormente terminar con un mural o instalación artística. Divulgadores del Museo de la Luz, en el cual me incluyo, realizamos en la primera semana las actividades de observación, experimentación y talleres con temas de la luz. Los artistas, que forman parte de Asociación de Artistas Plásticos de México A.C. (ARTAC), aunque llegaban con nosotros desde la primera semana, comenzaban a mediados de ésta y terminaban con la presentación de la obra el viernes de la segunda semana.

Los objetivos se plantearon con la intención de que cuando las niñas y los niños observaran el producto artístico terminado tuvieran una lectura diferente de él al observarla, que no nada más vieran los trazos, las figuras, las formas, los colores, sino que observaran más allá, que con la experiencia que habían vivido supieran de la importancia de la luz en la percepción de los colores, de los mecanismos y fenómenos físicos que están sucediendo en la interacción entre la luz natural o artificial con la obra; que supieran por qué brillan ciertas pinturas cuando se iluminan con un tipo u otro de luz, que conozcan porqué el color que percibimos dependerá del color de la luz incidente, que vean más allá de lo evidente, que vean con conocimiento y con emoción.

Los talleres que se escogieron fueron el Disco de Newton y el Anamorfismo. El hecho de haber escogido estos talleres se debe a que en ambos se utilizan pinturas de diferentes colores, y esto nos da la oportunidad de “jugar” (entendamos jugar como una forma de experimentar) con el tipo de colores que se ocupen. Los colores que se utilizaron fueron los normales, de madera, crayola y colores fluorescentes. Asimismo, se utilizaron objetos autoadheribles fosforescentes. Estos últimos colores que menciono son muy utilizados en la escuela, en particular en la primaria: son de uso familiar los marcatextos (fluorescentes) y cartulinas con colores muy brillantes (fluorescentes, también). Los objetos autoadheribles son estampas que brillan en la oscuridad y que pueden pegar en sus habitaciones. Esto es fundamental para la actividad, dado que estamos utilizando materiales que son conocidos por los alumnos y que se observan en un ambiente diferente y preparado.





El ambiente especial anteriormente mencionado lo creamos en la demostración de luminiscencias, la otra actividad de ciencia que se desarrollaba en las escuelas. Se oscurecía un salón y colocábamos lámparas especiales (lámparas de luz negra o UV), focos normales (la bombilla incandescente y la lámpara fluorescente compacta), además, una lámpara de leds la cual podíamos cambiar el color de la luz a nuestra conveniencia. Como parte de la demostración, dichas fuentes de luz hacían que dos líquidos al juntarlos emitieran luz (quimiluminiscencia). Es decir, en el salón oscuro los alumnos veían y experimentaban que existen varios mecanismos de generar luz, no nada más las conocidas y las más normales.

La primera actividad de ciencia que se realizaba era el taller. Pintaban el Disco de Newton o el Anamorfismo utilizando los distintos colores, dependiendo del grado escolar: para los alumnos de 1°, 2° y 3° el Anamorfismo, y 4°, 5° y 6° el Disco de Newton. Pero antes de comenzar, jugaban con prismas y espejos de tal suerte que tenían que meter un haz de luz y, con el prisma, generar el espectro visible. Ese momento de experiencia y observación fue uno de sus primeros asombros: el ver cómo se produce los colores a partir de la refracción de la luz por un prisma.

En el caso de que no fuera posible la anterior actividad, con el prisma se les pedía que vieran hacia una fuente luminosa, un foco o una lámpara del salón. Esa experiencia nos servía para comenzar el diálogo, el juego y motivar la curiosidad innata de los niños. Se hacía énfasis en que el color que percibimos de todo lo que nos rodea es gracias a que en la luz vienen todos los colores, lo que observamos es el resultado de esa luz, ya sea de un foco o la del Sol, interactuando con el material y objeto que observamos. Les hacíamos preguntas como: ¿qué color observarían de algo si la luz que incide en él estuviera compuesta de un solo color?, ¿el color que percibimos de un objeto es una característica exclusiva de él?, ¿qué papel juega la luz en todo esto? Para pintar su Disco de Newton o Anamorfismo les proporcionábamos colores fluorescentes, además de los normales. En ese momento no les decíamos las características y propiedades de una sustancia o pintura fluorescente, simplemente la experiencia era que observaran cómo unos colores brillan más que otros. En todas las sedes a las que fuimos, lo interesante fue que los alumnos conocían estos materiales, estas pinturas, estos marcatextos pero siempre había la confusión entre algo fluorescente y fosforescente, la evidencia era que unos colores brillan más que otros y hay objetos que brillan en la oscuridad. Los objetos que los alumnos elaboraron posteriormente los iban a observar en la demostración de luminiscencias, en el salón previamente oscurecido y con lámparas especiales. El asombro fue total: el ¡wowww! resonaba al unísono en el salón.

Lo primero que se hacía en el salón de la demostración de luminiscencia era mostrar, con diferentes focos o lámparas, que no todos los focos se calientan al estar emitiendo luz. Aunque parece una afirmación evidente, no lo es del todo cuando tocas o intentas tocar los focos encendidos. Todos conocen, por experiencia, que los focos de bombilla incandescentes cuando están emitiendo luz no se pueden tocar dado que están calientes. Pero no es tan conocido que las lámparas fluorescentes compactas (LFC) no se calientan. Al niño lo hacíamos tocar la lámpara y en ese momento la prendíamos, el niño sentía y veía que al estar emitiendo luz no se calentaba lo suficiente como para retirar las manos inmediatamente. Con los focos incandescentes bastaba con prenderlo unos segundos, después apagarlo, y decirle al niño que acercara la mano. Nunca llegaron a tocarlo porque sentían la emisión de energía térmica.

Dado que los alumnos llegaban con lo que habían elaborado en su taller, lo siguiente que se hacía era que observaran lo que pintaron, pero con un foco especial, una lámpara de luz negra. Como el salón estaba oscurecido, apagábamos todas las luces y veían que lo que habían hecho en el taller requería de luz para verlo, de hecho, se requiere de luz para poder ver todo lo que nos rodea. Al prender la lámpara de luz negra, observaban cómo la zona que habían pintado con la pintura fluorescente brillaba más que lo demás. Recordemos que en taller se usaron estampas fosforescentes, de tal suerte que cuando se apagaba la luz negra la pintura fluorescente dejaba de brillar y continuaba brillando la estampa fosforescente. Por lo tanto, los alumnos experimentaban en carne propia, y menciono carne propia porque literalmente eso se hacía, se les pintaba sus manitas o su carita con el marcatextos (plumón fluorescente) y se les colocaba una estampa fosforescente. Entonces observaban qué sucedía con los materiales fluorescentes y fosforescentes cuando la lámpara de luz negra estaba encendida, y lo que pasaba cuando la lámpara se apagaba. Esa era una gran experiencia y era el momento de comentarles la diferencia ente un fenómeno fosforescente y uno fluorescente (lo fosforescente brilla en la oscuridad y lo fluorescente brilla sólo mientras la luz negra esté encendida); además, tenían el ejemplo de algo que brilla, o está emitiendo luz, y no está caliente. Esto era sólo el principio en la demostración.

A continuación, experimentaban con dos sustancias líquidas: agua oxigenada y luminol. Pasaban al frente y cuando vertían un líquido en el otro en oscuridad, la reacción química que se genera produce luz. Los alumnos quedaban totalmente sorprendidos. Posteriormente, les dábamos las varitas o pulseras quimiluminiscentes que, en lo general, ya conocían, ocasionalmente en las fiestas dan estas varitas como parte de la diversión o inclusive, algunos alumnos, mencionaban que las habían visto y jugado con ellas en paletas de dulce. Antes de concluir, se hablaba de organismos vivos que tienen la propiedad de emitir luz y todos participaban contestando el nombre de esos bichos: luciérnagas, cocuyos, ciertos peces marinos, medusas y hasta de los hongos se habló.





Para finalizar, observaban lo que habían elaborado con una lámpara de led en la que se puede controlar el color de luz que emite. Tres colores son los importantes que emiten estas lámparas y que nosotros utilizamos: rojo, verde y azul. Cuando observaban su trabajo con pura luz roja, el aspecto del color cambiaba a cuando se observaba con luz verde y, no se diga, cuando se iluminaba con la azul. Con esta experiencia quedaba clara la importancia de la luz en la percepción del color de los objetos, cómo el color no es propiedad exclusiva del objeto, se hacía evidente el papel fundamental de la luz y de su naturaleza.

En las seis sedes que visitamos con esta actividad, se vio la misma admiración en los niños. De primero a sexto grado los comentarios fueron de sorpresa. En los salones que utilizamos para la demostración siempre había materiales de todo tipo de pintura, una gran variedad de color y objetos fluorescentes o fosforescentes o ambos, cartulinas, hojas, aros de colores, hasta un frisbee fosforescente. Por tanto, los alumnos podían ahora clasificar todo lo que observaban y usar correctamente ciertos términos científicos. Cuando los alumnos salían de la escuela y llevaban lo que hicieron en su taller y los objetos fosforescentes, fluorescentes, quimiluminiscentes, inmediatamente comentaban con sus padres lo que habían hecho.

Los artistas plásticos y una selección reducida de alumnos crearon un mural con una selección reducida de alumnos, en el que utilizaron pinturas regulares y las brillantes. Se colocaron lámparas de luz negra para que se observara el mural y los efectos lumínicos producidos por las lámparas. Los alumnos, seguramente, cuando veían la obra, recordarían lo vivido.

Para el Museo de la Luz, este binomio, divulgadores y artistas, no se había presentado. No se había tenido la oportunidad de juntos participar en un proyecto. El Museo de la Luz ha participado desde su inicio, hace veintiún años, en diversas actividades fuera del museo. Se llevan actividades a diferentes escuelas de educación básica, media superior y superior; así como, a diferentes eventos culturales que se organizan en la Ciudad de México y en el interior de la república mexicana. Sin embargo, la experiencia de estas seis escuelas ha sido muy enriquecedora y se han aprendido muchas cosas nuevas. Las actividades extramuros regulares tienen como fin mostrar el fenómeno de la luz con talleres y demostraciones diversas, el eje fundamental es la luz. En esta ocasión, no sólo fue así, sino que se buscó dejar en los niños la inquietud por la experimentación, la indagación y aprovechar su curiosidad natural. Nos centramos en el color, en la forma en que se genera, la importancia de la luz para ello; también, en mostrar los mecanismos diferentes que hay para producir luz. El hecho de que después los niños hayan desarrollado un mural y que en él se exponen las experiencias que vivieron en las actividades, además de referentes regionales y culturales, ha hecho que este proyecto tenga un toque especial.

Conclusión

En mi opinión, y en estos más de 26 años que llevo desarrollando actividades similares, el haber participado en este proyecto me ha abierto una posibilidad que no había explorado: hablar de la ciencia con el pretexto del desarrollo de una pieza artística. Normalmente, a los diversos lugares que he ido, siempre era la luz, y el conocimiento común que se tiene de ella, quien llevaba la pauta en el desarrollo de la charla, la conferencia, el taller, la demostración o cual fuere la estrategia o el proceso para que, al final de la actividad, se viera a la luz desde otra perspectiva, que se viera a la luz, además de familiar, con una mirada de curiosidad y generadora de una gran cantidad de fenómenos que vemos, admiramos y utilizamos a diario.

Cabe mencionar que, para diseñar o planear la estrategia en esta ocasión, comencé exponiendo, de manera informal, y como siempre lo hago, el tema de la luz a los artistas plásticos que participarían en el proyecto. Para ellos también era una experiencia nueva. Para determinar su pieza y la forma de trabajo que iban a desempeñar en las escuelas, tomaron ideas de lo que experimentaron en esa plática informal. Yo, por mi parte, al saber que el trabajo iba a ser conjunto, tenía que lograr que las niñas y los niños, cuando vieran lo creado, principalmente tuvieran una experiencia de gozo y admiración con la actividad de ciencia, como se tiene, normalmente, cuando se observa una pieza de arte. Ese fue el reto principal en el que me enfoqué. En el proceso de las actividades siempre tratamos de crear admiración y contemplación por los efectos ópticos observados y tener presente que eso que observaban y experimentaban se plasmaría de manera natural en una pieza artística. Me siento totalmente complacido de haber vivido esta experiencia y ahora poder compartirla; la ciencia y el arte, el arte y la ciencia siempre van de la mano.

Vol. 19, núm. 3 mayo-junio 2018

Ciencia y arte… A todas luces

José Ramón Hernández Balanzar Cita

Introducción

A todas luces, diálogo de saberes entre ciencia y arte es un proyecto que tuvo su origen en el año 2015 el marco de la reunión nacional de Coordinadores de la RedPEA, que es la red de escuelas asociadas a la unesco y que en nuestro país están coordinadas por la Comisión Nacional de Cooperación con la unesco bajo el auspicio de la Secretaría de Educación Pública (conalmex-sep). La participación y coincidencia en la mencionada reunión de la doctora Ana María Cetto del Museo de la Luz (ml-unam) y de la maestra Graciela Ferreiro de la Asociación de Artistas Plásticos de México (artac) provocó sinergia para que entre ambas instituciones representadas en sus personas, y a invitación de la conalmex, se buscará la posibilidad de generar un foro de participación, discusión, diálogo e intercambio de ideas entre expertos, estudiosos y apasionados en ambos temas: ciencia y arte, con el fin de promover entre las niñas y niños estudiantes de la escuelas de la RedPEA el trabajo artístico y científico en torno al tema de la luz desde ambas áreas y esferas de conocimiento. Es por lo anterior, que en junio de 2016 a iniciativa e invitación del Museo de la Luz se llevó a cabo el Seminario “A todas luces, diálogo de saberes entre ciencia y arte” −foro en el que artistas, científicos y divulgadores expusimos puntos de vista, trabajos artísticos y colaborativos, e investigaciones en torno a la luz−.

¿Por qué ciencia y arte?1

Fascinación y seducción, atracción y rechazo… Para muchos, la ciencia no busca el orden y la igualdad entre las cosas, sino aspectos todavía más generales del mundo en su conjunto, tales como “la simetría”, “la armonía”, “la belleza”, y “la elegancia”; aún a expensas, aparentemente, de su adecuación empírica, como por ejemplo la teoría general de la relatividad. Para los griegos la belleza tuvo siempre una significación enteramente objetiva. La belleza era verdad, constituía un carácter fundamental de la realidad. De ahí el famoso lema, tan significativo y usado a lo largo de la historia del pensamiento filosófico: “lo verdadero, lo bueno y lo bello convergen” (Pérez Tamayo, 2005).

En la misma ciencia más pura, la genialidad de los científicos ha sido ubicada, no en su inteligencia, considerada bastante normal, sino en una imaginación desbordada y muy fuera de lo común. De aquí que “la ciencia consiste en crear teorías”, es decir, modelos imaginados, estructuras teóricas, analogías, alegorías, símiles y comparaciones para representar los significados posibles de las realidades que nos circundan. Todo esto liga la ciencia con el arte.
Albert Einstein se refería a la teoría cuántica diciendo que “tal teoría no le gusta”, que “no le gustan sus elementos”, que “no le gustan sus implicaciones”, etcétera. Su asistente personal de investigación lo interpreta aclarando que “su enfoque [el de Einstein] tiene algo en común con el de un artista; que ese enfoque busca la simplicidad y la belleza” (Russell, 1975); que su método, aunque está basado en un profundo conocimiento de la física, es esencialmente estético e intuitivo; que, excepto por el hecho de ser el más grande los físicos desde Newton, uno podría casi decir que él no era tanto un científico cuanto un artista de la ciencia” (González Casanova, 2004).

El estudio de la relación ciencia y arte es, por sí mismo, bastante amplio, la fundamentación epistemológica de esa relación y su aplicación real o posible de ambos conceptos se asumen de manera particular en una de sus acepciones: la función cognitiva, es decir, como medio para la adquisición de conocimientos y de verdad.

El científico está convencido de que lo que demuestra científicamente constituye la verdad más firme y sólida. El filósofo piensa lo mismo cuando su razonamiento es lógico e inobjetable filosóficamente. Y el artista cree firmemente que con su obra de arte ha captado la esencia de la compleja realidad que vive.

Bertrand Russell, considerado uno de los pensadores más lúcidos del siglo xx y, quizá, de toda la historia de la humanidad, dice que “la ciencia, como persecución de la verdad, será igual, pero no superior al arte” (Clark, 1972). Asimismo, Goethe señala que el arte es la manifestación de las leyes secretas de la naturaleza.

La pasión por la aventura hacia la ciencia y el arte nos permite tener una imagen distinta de quiénes somos, ir más allá de las imágenes clásicas y estereotipadas. Nos da, fundamentalmente, mayor amplitud, mayor versatilidad. Es decir, adquirimos una mayor capacidad de apreciar la enorme variedad de aspectos y propiedades físicas que tiene la naturaleza para su mayor entendimiento, en consecuencia.

A todas luces… CONALMEX-ARTAC-Museo de la Luz UNAM

El desarrollo de las experiencias en las escuelas participantes de la RedPEA fue mediante actividades lúdicas, educativas y artísticas enfocadas a la educación para el desarrollo sostenible. El reto fue difundir este concepto a través de una aplicación/integración del fenómeno de la luz en procesos de creatividad científica y artística, dirigidos a estudiantes de primaria de las escuelas de la RedPEA en seis estados de la república mexicana. En los talleres impartidos por el Museo de la Luz, se vinculó la ciencia con el arte a través de diferentes fenómenos característicos de lumicisencias, fluoresencias, la suma y resta de los colores, la reflexión y refracción de la luz, ilusiones ópticas, y aspectos básicos y generales de luz y energía.

La fusión entre ciencia y arte, y el manejo cultural, inter y multidisciplinario de este proyecto permitieron mostrar el valor agregado para que la conalmex y la sep consideraran en 2017 el primer proyecto de apoyo para México dentro de los Programas de Participación de la unesco.

La experiencia de vincular la ciencia sobre la luz con el aspecto lúdico-creativo en la construcción de objetos con un sentido estético-artístico produjo como producto en cada escuela un bello, útil y verdadero mural colectivo, que hoy forma parte del patrimonio artístico, científico y cultural de cada institución. El éxito de este proyecto permitirá que en 2019 siga formando parte de los Programas de Participación apoyados por la conalmex en la unesco. Así también, que sea un programa que se presente en más escuelas; y que se capaciten profesores normalistas, con el fin de replicar dicha actividad en años subsecuentes y se llegue a más estudiantes en diferentes estados del país.

Referencias

  • Clark, R. (1972). Einstein: the life and times. Nueva York, NY: Avon Books.
  • González Casanova, P. (2004). Las Nuevas Ciencias y las Humanidades. Barcelona, Ed. Complutense, IIS-UNAM.
  • Hernández Balanzar J. R. (mayo 2006). ¿Por qué ciencia y arte? Primer simposio de Ciencia y Arte en el Instituto de Ciencias Nucleares de la unam. México.
  • Russell, B. (1975). La perspectiva científica. Barcelona: Ariel.
  • Pérez Tamayo, R. (2005). Arte y Ciencia [Entrevista de José Gordon]. Revista de la Universidad de México, 20, pp. 51-55.

Vol. 19, núm. 3 mayo-junio 2018

Galería fotográfica
A todas luces, diálogo de saberes entre arte y ciencia

Federico Nájera Febles Cita

Actividades de ciencia

Para el desarrollo de las actividades de ciencia del proyecto A todas luces, diálogo de saberes entre arte y ciencia se consideró el tema color como un puente conceptual para unir ambas disciplinas y elaborar con esta base una secuencia didáctica que favoreciera la observación, la experimentación, la indagación y el diálogo constante.

Los talleres de ciencia realizados son actividades procedimentales que buscan promover el pensamiento crítico y analítico, hacia diferentes hechos y fenómenos. Entre los talleres realizados destacan el Disco de Newton y el Anamorfismo.

Durante los talleres se formulan preguntas detonadoras como: ¿A qué se debe el color de las cosas? ¿Qué papel juega la luz en este proceso? ¿Qué es la luz? ¿Cuántas formas existen de generar luz? Esto con la intensión de promover el aprendizaje activo mediante el diálogo.

Demostración de luminiscencias

En esta actividad se realizan diversos experimentos en torno al tema de la luz y el color, así los participantes juegan con prismas para descubrir que la luz blanca esta formada por todos los colores o con materiales foto luminiscentes para conocer más acerca de las luminiscencias.


Actividades de arte

La elaboración de cada mural tuvo una duración de dos semanas por cada escuela. En esta actividad se buscó establecer un vinculo entre los talleres de ciencia y las actividades de arte, mediante el empleo de distintas metodologías desarrolladas especialmente para el proyecto, artistas y divulgadores plasmar este trabajo la creación artística del mural. En cada escuela se selecciono un grupo de niños y se realizaron juegos y ejercicios de percepción visual y sensibilidad estética; se definió el contenido a plasmar mediante una lluvia de ideas con los niños y se trazaron los primeros apuntes y bocetos. Posteriormente se formaron equipos pequeños para realizar tareas complementarias; y manos a la obra hasta terminar el mural, y presentarlo ante la comunidad escolar.

Vol. 20, núm. 3 mayo-junio 2019

Pérdida de visión por diabetes: detección y tratamiento

Stéphanie Thébault Cita

Resumen

La retinopatía diabética (rd), enfermedad de la retina comúnmente clasificada como una complicación vascular de la diabetes, es ahora reconocida como una afección que implica tanto a los vasos como a las neuronas (neurovascular). Muchas evidencias apuntan a que esta neuropatía sensorial resulta de la ruptura de la unidad neurovascular. A pesar de ello, las terapias actuales se centran en limitar las anomalías vasculares, incluyendo la formación de vasos sanguíneos irregulares y la hinchazón en la parte central de la retina (conocida como edema macular). Con base en que la ruptura de la unidad neurovascular es un evento temprano en la rd, muchos esfuerzos científicos se centran en encontrar los mecanismos que se vinculan con su ruptura, para lograr el desarrollo de nuevos tratamientos en etapas tempranas. Sin embargo, también hace falta desarrollar y validar nuevos marcadores tempranos de la función visual para reducir la duración de los ensayos clínicos y acelerar la entrega de nuevos tratamientos contra la rd para la población en general. En este trabajo, revisamos qué es la unidad neurovascular retiniana y las alteraciones tempranas que la misma sufre en condiciones de diabetes, y examinamos a detalle la necesidad de generar criterios de valoración temprana de la función visual para los futuros ensayos clínicos que evalúan los nuevos tratamientos para la rd.
Palabras clave: retinopatía diabética, visión, unidad neurovascular, criterios de valoración funcional temprana, terapias.

Diabetic retinopathy: early detection

Abstract

Diabetic retinopathy (dr), commonly classified as a vascular complication of diabetes, is now recognized as a neurovascular affliction. A comprehensive set of evidence points to the fact that dr is a sensory neuropathy resulting from the neurovascular unit rupture, and that neuronal death is an early event in the pathogenesis of dr. However, current therapies for dr only focus on limiting the vascular alterations, including abnormal formation of new blood vessels and macular edema. Based on this information, much scientists’ efforts are about elucidating the mechanisms underlying both neurodegeneration and neurovascular unit rupture to develop new treatments for initial stages of dr. The identification and validation of early markers of visual function is also required to reduce the duration of clinical trials and to accelerate the delivery of new treatments for dr to the general population. In this article, we describe the neurovascular unit of the retina and examine how the retina is altered in early stages of diabetes. We also comment on how early functional endpoint of visual function would impact future clinical trials that aim to assess novel therapeutic options for dr.
Keywords: diabetic retinopathy, vision, neurovascular unit, early functional endpoint, therapies.

¿Qué es la retinopatía diabética?

La retinopatía diabética (rd) es la principal causa de ceguera en personas laboralmente activas y, tradicionalmente, se ha considerado como una complicación de la diabetes que afecta los vasos sanguíneos (complicación vascular).

Al clasificar esta enfermedad clínicamente, se toman en cuenta sólo los cambios estructurales en los vasos de la retina (Aiello, 2003; Wilkinson et al., 2003), pues durante la exploración del fondo de ojo (oftalmoscopia) la formación excesiva de nuevos vasos sanguíneos anómalos es visible –ya que la retina es transparente–, y ese daño vascular coincide con la pérdida de visión.

Fue hasta la década de los sesenta cuando Wolter (1961) y Bloodworth (1962) identificaron que existe un componente neuronal en la retina. A partir de un estudio con diabéticos post mortem, descubrieron neuronas en proceso de degradación en la retina. Desde entonces, se ha acumulado mucha evidencia sobre la participación de las neuronas en la rd (Cunha-Vaz, 2012). Actualmente se realizan ensayos que exploran el efecto de varias terapias diseñadas para revertir el daño neuronal en la rd (Cunha-Vaz, 2012). Sin embargo, esta enfermedad no se atiende si no se presentan cambios vasculares visibles, aunque las lesiones en las neuronas ocurren y evolucionan al mismo tiempo –o hasta antes– que las lesiones vasculares. Eso se debe a que no existe un punto de control funcional temprano para detectar la enfermedad.

Figura 1. Se muestra la composición de la retina y las alteraciones vasculares en la RD.

Con el fin de reducir la pérdida de la visión por esta enfermedad, se ha enfatizado mucho el componente vascular y los tratamientos se han dirigido hacia los vasos sanguíneos. De esta manera, se ha considerado muy poco la contribución de la retina neural en este proceso.

Para tratar la rd, desde hace cinco décadas, se ha empleado la fotocoagulación panretiniana, una cirugía ocular que utiliza un láser en áreas extensas de la retina que se centra en tratar los microaneurismas, que son pequeñas dilataciones en forma de saco en los vasos sanguíneos, con escape en la retina. Sin embargo, los efectos de este tratamiento son indirectos,1 pues es altamente eficaz para preservar la agudeza visual central (Group, 1976), pero reduce el campo de visión periférica (Doft y Blankenship, 1982; Early Treatment Diabetic Retinopathy Study Research Group, 1991; Pahor, 1998) y la visión nocturna (Pender et al., 1981; Russell et al., 1985; Seiberth et al., 1987). Por lo tanto, se puede considerar que la fotocoagulación panretiniana es similar a una amputación, en el sentido que la retina periférica se sacrifica para que la visión central pueda ser preservada. Los efectos secundarios de esta cirugía con láser han promovido investigaciones para desarrollar estrategias farmacológicas para mejorar la rd. Actualmente, veintinueve fármacos para tratar la rd se encuentran en ensayos clínicos fase ii (doce), fase III (nueve) y fase iv (ocho) (como se puede ver aquí).

Antes de que llegarán las inyecciones intraoculares, el edema macular secundario a la diabetes se trataba también con láser focal en el centro de la mácula. El edema macular diabético corresponde a la hinchazón de la mácula, que es la zona del ojo responsable de la visión de los detalles. Actualmente se trata con inyecciones intraoculares de agentes que controlan los vasos sanguíneos (anti-vegf), los cuales son una gran avance en comparación con la fotocoagulación con láser focal ya que mejoran la agudeza visual y ralentizan la progresión de las lesiones vasculares (Nguyen et al., 2009). Sin embargo, estos agentes sólo mejoran la agudeza visual de entre 30 y 50% de los pacientes afectados (Mitchell et al., 2011; Nguyen et al., 2012 y 2009), lo que sugiere que otros fenómenos intervienen en la patogénesis de la rd, además de la sobrerregulación de vegf.

Por todo lo anterior, queda claro que muchas personas se verían beneficiadas por tratamientos que se dirigen a atacar la progresión de la rd en sus etapas iniciales (Simo et al., 2012). La obtención de dichas terapias depende del desarrollo de marcadores tempranos de la función visual, la cual, a su vez, depende de la integridad de la unidad neurovascular retiniana.

La unidad neurovascular de la retina

En todo el sistema nervioso, las neuronas, las células gliales –que son células del tejido nervioso que complementan la actividad neuronal–, así como los vasos sanguíneos se organizan en unidades neurovasculares. El estrecho contacto físico entre estos diferentes tipos de células permite una integración funcional que media las respuestas de adaptación a diversas condiciones. Las unidades neurovasculares coordinan la demanda energética (metabólica), la actividad de las sinapsis, la entrega de sangre y la eliminación de residuos como el glutamato, el óxido nítrico, la adenosina, los metabolitos del ácido araquidónico y varios ácidos (Kur et al., 2012; Metea y Newman, 2007).

En términos generales, la actividad de las neuronas depende de los vasos sanguíneos, ya que éstos entregan nutrientes y eliminan los productos de desecho de los tejidos. Además, intervienen las células gliales o de la glia, de las cuales existen varios tipos: los astrocitos, la microglia y un tipo específico de la retina: la glia de Müller. Las células de Müller coordinan las respuestas vasculares para satisfacer la demanda metabólica de las neuronas, el intercambio de metabolitos, el reciclaje de neurotransmisores como el glutamato, y también ayudan a establecer los entornos químicos afuera de las neuronas, para que se den el potencial de membrana y la actividad eléctrica adecuados. Los astrocitos hacen contacto con los vasos sanguíneos para mantener su forma y función (Petzold y Murthy, 2011). Las células de la microglia monitorean la actividad celular local y la actividad sináptica (Schafer et al., 2012), y sirven para deshacerse de células muertas. La actividad coordinada de todas estas células (neuronas, células gliales y vasculares) es esencial para la visión normal (ver figura 1).



Figura 2. Las neuronas (células ganglionares, amacrinas, bipolares, horizontales, conos y bastones), la glía (células de Müller, astrocitos y células de la microglia) y las células vasculares comprenden la unidad neurovascular de la retina. La gran cantidad de conexiones fisiológicas y anatómicas entre estas células permite la visión.

Aunque muchos detalles sobre las conexiones entre las células que forman la unidad neurovascular de la retina quedan por ser determinados, se ha podido caracterizar las relaciones físicas entre ellas. Las neuronas se comunican a través de sinapsis químicas, que utilizan neurotransmisores como glutamato, dopamina, ácido gamma aminobutírico o gaba, acetilcolina o glicina; y a través de sinapsis eléctricas (uniones comunicantes) que están conformadas por ensambles de proteínas de tipo conexina, que permiten el flujo de iones entre células adyacentes (Volgyi et al., 2013). Las células vasculares se comunican entre ellas mediante uniones estrechas (Runkle y Antonetti, 2011). Estas conexiones complejas revelan por qué los primeros anatomistas que las estudiaron llamaron a esa red de células retina, que en latín medieval significa “túnica como una red”.

Las alteraciones tempranas de la retina en la diabetes

El curso temporal preciso y la serie de eventos que llevan a la aparición de la rd quedan por ser definidos con claridad. Sin embargo, las evaluaciones de los pacientes con diabetes sin retinopatía indican que el daño de la estructura y función de la parte neural de la retina precede las lesiones vasculares clínicamente observables. Éstas, tradicionalmente, incluyen los microaneurismas,2 las hemorragias (sangrados) y los exudados lipídicos (depósitos). Cabe señalar que se observan modificaciones similares de la unidad neurovascular en el cerebro de pacientes con otras enfermedades neurodegenerativas como Alzheimer y Parkinson (del Zoppo, 2010; Zlokovic, 2008). Además, se sabe que en pacientes con diabetes tipo 1 o tipo 2 que todavía no presentan signos visibles de retinopatía estas alteraciones se manifiestan en forma de una incapacidad de contraer y dilatar sus vasos sanguíneos en respuesta a respirar oxígeno al 100% o recibir luz parpadeante, respectivamente (Bek et al. 2008; Garhofer et al., 2004; Lasta et al., 2013; Lott et al., 2012). Estos cambios parecen reflejar el deterioro precoz de los mecanismos reguladores que normalmente existen en la unidad neurovascular de la retina, y no el ser alteraciones aisladas en los vasos sanguíneos (Antonetti et al., 2012).

Se han reportado más alteraciones en la fase preclínica de la rd, que incluyen una respuesta más lenta en el electrorretinograma multifocal (mferg, por sus siglas en inglés), la cual predice la aparición de lesiones vasculares (Harrison et al., 2011; Ng et al., 2008), una sensibilidad reducida al contraste luminoso y a la adaptación en la oscuridad (Greenstein et al., 1993) y una disminución en el campo visual (Jackson et al., 2012; Parravano et al., 2008). Asimismo, se ha medido una reducción en el espesor de la retina interna en la fase preclínica (Park et al., 2011; van Dijk et al., 2010), como se puede ver en la figura 2.

Figura 3. Alteraciones sub/preclínicas de la retinopatía diabética (RD).

En conjunto, todas estas observaciones muestran que la diabetes tiene efectos deletéreos tempranos sobre la estructura y función de la unidad neurovascular retiniana, y también indican que reconocer las alteraciones subclínicas en la función de la unidad neurovascular puede ayudar a identificar a las personas en riesgo de pérdida de visión.

Algunas de estas alteraciones pueden ser adaptaciones fisiológicas a la condición de diabetes, las cuales pretenden mantener la retina viva y funcional, para conservar la visión. Se considera que las características clínicas de la rd aparecen cuando estas adaptaciones ya no logran mantener viable la retina. Asimismo, cabe la posibilidad de que las alteraciones anteriormente referidas no sean nada más adaptaciones fisiológicas de esta condición, sino que también sean cambios que ocurren en respuesta a la hipertensión o la inflamación que acompañan la diabetes (Antonetti et al., 2006).

Además, cabe mencionar que en las fases clínicas de la rd, la ruptura progresiva de la unidad neurovascular y la pérdida de la capacidad de autorregulación resultan en tortuosidades y dilatación de las venas, que conllevan a la aparición del edema macular y de la rd proliferativa (Kristinsson et al., 1997; Kylstra et al., 1986; Sinclair et al., 1982). Por lo tanto, se puede considerar que las alteraciones de unidad neurovascular retiniana forman parte de un espectro más amplio de efectos sobre el sistema nervioso en relación con la diabetes, que incluyen a las neuropatías sensoriales y autónomas, así como al deterioro cognitivo (Reijmer et al., 2013; Umegaki, 2012).

Los factores oculares y circulantes que contribuyen al desarrollo y progresión de la rd han sido complejos y difíciles de aproximar, debido a la falta de modelos animales que recapitulen completamente la patología humana. No obstante, la comprensión actual de su patogénesis se debe al estudio de modelos en roedores, en paralelo con el análisis de pacientes de una manera integrativa (Gardner et al., 2011). Gracias a ello, se sabe que entre los factores que participan en el desarrollo y la progresión de la rd se encuentran las alteraciones metabólicas, incluyendo la hiperglucemia, reducción de la señalización a través del receptor a insulina, estrés oxidativo, formación de productos finales de glicación avanzada, alteraciones lipídicas, entre otras; la inflamación, principalmente caracterizada por niveles aumentados de citocinas pro-inflamatorias; la toxicidad asociada al glutamato; y los niveles reducidos de factores neuroprotectores naturalmente presentes en la retina.

Sobre los criterios de valoración temprana de la función visual en la diabetes

La alta frecuencia de rd al momento del diagnóstico de la diabetes tipo 2 se debe a que esta enfermedad comienza entre cuatro y siete años antes del diagnóstico clínico. A los 10 años de diabetes tipo 2, entre 35 y 40% de los pacientes presentan rd, llegando a 80% a los 20 años de evolución. La rd provoca poca sintomatología en sus etapas iniciales y no afecta la visión hasta etapas muy avanzadas. Esto hace que, con frecuencia, el diagnóstico, que se basa en la detección de anomalías vasculares por inspección visual, sea tardío y que, al momento del diagnóstico, en 10% de los casos se detecten complicaciones serias, como hemorragia vítrea, desprendimiento de retina traccional o edema macular (Cohen y Gardner, 2016). Por lo tanto, es necesario establecer criterios de valoración temprana, para detectar la rd, mediante puntos de control funcional tempranos (ver figura 3).



Figura 4. Curso temporal de la aparición de la retinopatía diabética (RD).

De igual manera, el uso de criterios de valoración para la visión alternos podría acortar la duración de los ensayos clínicos y acelerar el desarrollo de nuevas terapias contra la rd (Stem y Gardner, 2013). Para ello, el consorcio europeo para el grupo de estudio de tratamiento temprano de rd (eurocondor) ha estado usando el tiempo implícito del mfERG como su principal criterio de evaluación para medir la disfunción de las neuronas en la retina. No obstante, otros criterios de valoración funcional, como el mfERG, necesitan ser desarrollados y estandarizados para evaluar la eficacia de las nuevas estrategias neuroprotectoras para la rd. En efecto, se ha propuesto el uso de agentes que reducen la inflamación, restauran el receptor de la insulina en la retina, inhiben receptores a glutamato o bloquean la muerte celular programada, los cuales son promisorios como nuevas terapias para tratar la rd en etapas tempranas. Sin embargo, hace falta evaluar, en estudios clínicos, estas opciones terapéuticas mediante criterios de valoración temprana de la función retiniana antes de que dichos agentes puedan ser utilizados para tratar el número, siempre creciente, de pacientes con rd.

El hecho de que sólo 7% de las personas con diabetes tipo 2 (Saydah et al., 2004) y un tercio de los niños con diabetes tipo 1 cumplan con los objetivos terapéuticos para los niveles de hemoglobina glicosilada (HbA1c) en sangre de la Asociación Americana de Diabetes y de la Sociedad Internacional para los lineamientos clínicos sobre la diabetes en infantes y adolescentes (Wood et al., 2013) revela lo difícil y complejo que es prevenir y tratar la rd. Es por ello que la disponibilidad de métodos más cuantitativos y sensibles para la detección preclínica de los daños de la unidad neurovascular en la retina será crítica en un futuro próximo (Jackson et al., 2012; Lott et al., 2012).

Conclusiones

La rd se entiende ahora como una neuropatía sensorial, similar a otras que afectan a las personas con diabetes. Las terapias actuales se centran en mitigar las secuelas vasculares avanzadas de la rd. Hoy en día se están probando agentes con propiedades neuroprotectoras para determinar su capacidad de disminuir la pérdida visual progresiva que se asocia a la diabetes. Los mecanismos moleculares implicados en la degradación neuronal asociada a la rd son complejos e incluyen, probablemente, una combinación de factores oculares, tales como niveles excesivos de estrés oxidativo y de inflamación, de factores neuroprotectores naturales, toxicidad relacionada con el glutamato y con factores circulantes como la deficiencia a la insulina, hiperglucemia y dislipidemias. El desarrollo de nuevas terapias requiere identificar criterios de valoración funcional temprana de la función retiniana, que reflejen con precisión la función visual, y que puedan utilizarse como nuevos marcadores de la agudeza visual.

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Recepción: 05/01/18. Aprobación: 23/11/18.

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Revista Digital Universitaria Publicación bimestral Vol. 18, Núm. 6julio-agosto 2017 ISSN: 1607 - 6079